Para Catalina Riera, alcaldesa de Manacor (Pi), la segunda mujer en este cargo en la historia de Manacor, y tercer alcalde en lo que ha transcurrido de legislatura, percibe que la inmigración es un proceso normal de la vida y se debe sacar siempre la parte positiva de la interculturalidad, Baleares Sin Fronteras la entrevistó en su despacho.
Pregunta: ¿Dos años para gobernar no es mucho, cuáles son las propuestas que plantea para el municipio?
Respuesta: es un reto importante trabajar para el bienestar de todos los ciudadanos en todos los aspectos, mejorar la calidad de los servicios como la limpieza, apoyar a la Policía Local facilitando el control para que se cumplan las ordenanzas municipales, adecuar las calles y plazas de forma integral para la calidad de vida de los manacoris. No podemos hablar de un proyecto estrella, desde hace años se han ido poniendo las bases de un trabajo, algunas cosas han avanzado más que otras.
Pregunta: Manacor es una de las tres ciudades más importantes de Mallorca, no faltan quienes siguen pensando que la inmigración es un problema. ¿Qué opina?
Respuesta: desde el Ayuntamiento se promueven acciones para generar la buena convivencia en la ciudad. A veces se ve la parte negativa y positiva de la interculturalidad, en mi concepto es muy positivo tener la posibilidad de convivir con ochenta nacionalidades. Debemos ser capaces de mirar hacia el futuro y entender que esto es un hecho estructural. Tenemos una mediadora intercultural, muchas veces cuando las personas vienen al Ayuntamiento lo hacen porque han contactado primero con ella. En esa línea, a través del trabajo que realiza se conoce de primera mano las necesidades y problemáticas de algunos colectivos.
Pregunta: aunque se asume la interculturalidad con normalidad, basta con leer comentarios en las redes sociales para ver que hay mucha gente reticente ¿está de acuerdo?
Respuesta: cada uno tiene sus propias experiencias. Las hay buenas y malas con gente de afuera o con personas nacidas aquí. No me gusta para nada generalizar etiquetar o generalizar a nadie por su procedencia. Estamos anclados en algo que no es. Lo que hay es lo que hay y debemos sacar lo mejor de cada situación. No podemos vivir en el pasado, ni pretender que Mallorca sea la de hace cien años, eso es imposible, el mundo ha cambiado.
Pregunta: ¿qué opina del concepto que tienen algunos de que para los de aquí nada de nada y para los de afuera solo ayudas, especialmente si no tienen papeles?
Respuesta: La mayoría de gente que viene a pedir ayuda o asesoría tiene su situación administrativa regulada. Fui regidora de servicios sociales y sí es verdad que había mucha leyenda urbana y demasiados bulos. Me encontré con situaciones tan surrealistas como alguien que se atrevió a afirmar que yo había estado en un hipermercado pagando el carrito de la compra de una persona inmigrante. Cuando me enteré de este rumor que desde luego, era una absoluta mentira, me cuestioné hasta dónde es capaz de llegar la mente de alguien. Otra anécdota fue un reclamo que recibí de un ciudadano que me señalaba de pagarle el alquiler a un inmigrante. Le invité a que me llevara al siguiente día a la persona que supuestamente se beneficiaba de estas ayudas mías, simplemente nunca más volvió por el Ayuntamiento, sencillamente porque ese beneficiario no existía. Por eso le digo que sobre esta temática hay mucha leyenda urbana. No es cierto afirmar que los únicos que reciben ayudas del Ayuntamiento son los inmigrantes, si mirásemos las proporciones, la realidad no tiene nada que ver con lo que se dice. En el Ayuntamiento en el momento de recibir una ayuda nos es indiferente el lugar de procedencia.
Pregunta: en Manacor muchas mujeres origen musulmán, 1.631 marroquís por citar a este colectivo. En este mes de marzo se celebró el día de la mujer y se reivindica la igualdad de géneros, ¿desde el Ayuntamiento se promueve algún tipo de acciones en este sentido?
Respuesta: no solamente trabajamos por este colectivo, los propios mallorquines estamos luchando por la igualdad de hombres y mujeres. En lo que respecta a nosotros como administración municipal, es importante recordar que desde el Ayuntamiento estamos trabajando desde hace una década para lograr la integración de las mujeres de otras culturas dándoles la oportunidad de que conozcan la sociedad en la que viven, los sistemas educativos, sociales y sanitarios para que vayan siendo más autónomas. Sin embargo, somos conscientes que este cambio no se puede producir de un día para otro, especialmente si hablamos de culturas arraigadas.
La marroquí, mayoría de población extranjera
En este municipio hay un total de 45.166, empadronados de los cuales el 50,22% son hombres y el 49,78, mujeres. La comunidad con mayor representante de población es la marroquí, hombres 2.118 y mujeres 1.631. Le sigue la comunidad alemana con un total de 1.608, 823 hombres y 785 mujeres.
Dentro del grupo de inmigrantes sudamericanos, los colombianos están a la cabeza con 268 hombres y 301 mujeres para un total de 569 empadronados. Luego está el colectivo ecuatoriano que suma 366 de los cuales 207 son hombres y 159 corresponde a la población femenina.