Varias temáticas interesantes de análisis en estas cortas líneas. No es para menos comenzar con la situación de los refugiados que han llegado a España tras las nuevas políticas de acogida del Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apoyado por la mayoría de coaliciones políticas.
A veces leyendo las opiniones de las redes sociales me da la sensación que cuando se habla de populismo nos vamos a los extremos. Tan populistas pueden llegar a ser las políticas tan criticadas de Sánchez como la desaforada resurrección patriótica en la que algunos comentarios nos hacen sentir a los inmigrantes como la peor peste del planeta.
Me excusarán mis amigos, mi intención no es ofender a nadie, pero hay frases absolutamente no propias de la época en la que vivimos, ni tampoco pretendo no atender a razones que por muy reivindicativas y justas que parezcan desvirtúan cualquier argumento con criterios sólidos.
Aquella frase que está haciendo carrera a raíz de todo lo que está sucediendo, “los españoles primero” no deja de ser hiriente para quienes llevamos casi toda una vida en este país cotizando a la Seguridad Social, pagando impuestos, generando empleo y arraigados con hijos e hijas.
Sin renunciar a nuestras costumbres ni tradiciones, no deja de sentirse tristeza, impotencia y hasta rabia por algunas actitudes claramente individualistas, egoístas e hirientes. ¿Saben por qué?, sencillamente por la gratitud que le guardo a este país y a las personas que algún día me abrieron las puertas para desarrollarme personal y profesionalmente, no somos de donde nacemos sino de donde nos hacemos.
Peor aún, mensajes escritos por gente profesional que con esas palabras encienden la hoguera de la intolerancia, crean rivalidades y en nada contribuyen a la buena convivencia. Lo de los barcos con refugiados lo encuentro normal, hoy por hoy proliferan el negocio de las mafias, pero desde los países desarrollados no se hace nada al respecto para luchar contra ellos. Sacamos un cero muy redondo en materia de cooperación internacional.
Y lo que se avecina puede ser aún de grandes magnitudes. Antes de emplear la frase que acabo de citar, preferiría que leyéramos un poco sobre el aporte de la inmigración. Con ello no avalo la típica frase de “papeles para todos”, simplemente, antes de seguir demonizando el fenómeno migratorio debemos multiplicar y luego restar todo lo que podríamos tener de no haber sido por la corrupción que ha desangrado las arcas del Estado.
Ya está bien de culpar a los llegados de fuera de nuestras desgracias. ¿Por qué esos mismos que arremeten contra los barcos en que llegan los “negritos”, como he podido leerlo, no escriben exigiendo en sus muros que Iñaki devuelva lo sustraído al Estado?. Amnesia con los banqueros que estafaron a miles de pensionados con las preferentes, incluso, hasta algunos los empujaron al suicidio. Recordemos la cantidad de sueldos vitalicios para los políticos en este país.
Seguro que lo del Aquarius es solo un sofisma de distracción para la cantidad de problemas que hay que comenzar a limpiar desde nuestra propia casa. Digo nuestra, porque como miles de ciudadanos que han llegado a este país me siento parte integral de esta sociedad.
Creo que la mejor frase en estos casos para limpiar la casa y mirar la esencia de lo que nos destruye es “los ciudadanos de bien, primero”.
Para terminar no quiero dejar de mencionar las inhumanas políticas de Donald Trump en la frontera con México. He leído a mucha gente en las redes pidiendo un personaje de estos para España. Y si por cuestiones de la vida un tipo de estos lo separa de sus hijos, usted que lo pide a gritos, ¿qué sentiría?.
Algunos opinarán que es un tema que los inmigrantes mexicanos y de parte de Centroamérica se lo han buscado, pero en mi opinión, ningún fin justifica los medios cuando se trata de arruinar para siempre la inocencia de la niñez.
La últimas noticias desvelan que por presiones mediáticas hasta de su propia gente, Trump dio marcha atrás, sin embargo, el daño está causado.