Según Vox, la Junta de Andalucía dispone de información sobre la identidad de al menos 52.000 extranjeros irregulares que o bien están empadronados en municipios de Andalucía o han solicitado tarjeta sanitaria.
El partido de Abascal considera que estos 52.000 “inmigrantes ilegales” no han sido expulsados al no haber facilitado la Junta de Andalucía al Cuerpo Nacional de Policía la identidad de los mismos.
Esta “medida contra la inmigración ilegal” es una de las exigencias que Vox había planteado como requisito para apoyar la investidura de Juan Manuel Moreno como próximo presidente de la Junta de Andalucía, medida que ya ha sido rechazado por el Partido Popular.
Además de expulsar a estos 52.000 extranjeros en situación irregular, el líder de Vox quiere suprimir las ayudas a los inmigrantes irregulares e ilegalizar a las organizaciones que cooperan con las mafias del tráfico de personas o favorezcan la inmigración ilegal.
Finalmente, tras haberse quedado en el aire dicho planteamiento de este partido político, Juan Manuel Moreno será el presidente de la Junta de Andalucía.
