BSF
La Guardia Civil detuvo ayer por la tarde a un hombre en Santa Ponça, en Calvià, por desobediencia por incumplir las restricciones del estado de alarmada ocasionada por el COVID-19.
El ciudadano hizo caso omiso a las reiteradas indicaciones de los agentes y no guardó la distancia mínima de seguridad de dos metros.
Además, amenazó a los guardias civiles y al personal de una hamburguesería donde se encontraba. Por todo ello, acabó arrestado.
Mientras, la Policía Nacional impidió ayer la entrada en Mallorca a un pasajero de un vuelo internacional procedente de Alemania por no estar justificado su viaje y no cumplir los requisitos establecidos. El viajero fue detectado ayer por la tarde tras aterrizar en el aeropuerto de Son Sant Joan en un vuelo de Hamburgo. Los agentes comprobaron que no estaba justificado su desplazamiento y el ciudadano germano fue retornado de nuevo a Alemania.