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Un aluvión de dudas ha provocado la denominada ‘Ley Celaá’. Una de las preguntas del común de la gente es, cuándo entrará en vigor. Si todo sale como está planificado en el próximo curso 2021/2022 ya podría aplicarse. Los partidos opositores al gobierno de coalición adelantaron a los medios que en las comunidades autónomas donde gobiernan ampararán las figuras de la educación concertada y la especial.
Cabe destacar que la ‘Ley Celaá’ recién comienza su trámite parlamentario. Luego de aprobarse en el Congreso, debe pasar por el Senado.
¿Qué es lo que se viene en adelante?. Simplemente que con el calendario sobre la mesa del 2021/2022 podría llevarse a la práctica esta nueva ley.
Eliminación del castellano como lengua vehicular
Los cambios de esta nueva ley no incluyen al castellano como lengua vehicular en la enseñanza. Los grupos de la oposición han calificado la medida de anticonstitucional y una cesión al independentismo catalán. Sin embargo, ahora serán las comunidades autónomas las que tengan la última palabra para determinar la enseñanza en castellano y en sus lenguas cooficiales amparados en la Constitución.
Con esto, se pretende que al terminar la educación básica los estudiantes tengan la capacidad de dominar la lengua castellana y la cooficial de la comunidad donde residan.
Educación concertada
La ‘Ley Celaá’ propone que los centros públicos y privados concertados no reciban ninguna cantidad de las familias por recibir las enseñanzas de carácter gratuito, además no se podrá imponer a las familias la obligación de aportar a fundaciones o asociaciones ni tampoco establecer servicios obligatorios, asociados a las enseñanzas, que demanden algún tipo de aporte económico.
La religión no contará como asignatura obligatoria
De la misma manera, la asignatura de religión podrá seguir recibiéndose, no obstante, la ley hace hincapié en el derecho del alumno a optar por cursar o no esta materia, tal y como lo determinó en su momento la LOMCE”. Cabe destacar que la nota obtenida en religión no será tenida en cuenta para optar a becas, además no tendrá asignatura espejo, como lo era hasta el momento Valores Éticos, para los que no escogieran religión.
Por otra parte, los alumnos que no quieran esta asignatura no estarán en la obligación de cursar una materia alternativa. Es importante resaltar que se ha incluido una asignatura obligatoria, Valores Cívicos y Éticos, en 5º o 6º de primaria y en 4º de la ESO. La temática consiste en Educación para la Ciudadanía que abarca asuntos como la igualdad de género y la educación digital.
Segregación por sexos e igualdad de género
La Ley Celaá también obliga a que los centros que se financian parcial o totalmente con fondos públicos se regirán por el principio de coeducación en todas las etapas educativas y no separarán al alumnado por su género. Concretamente, promoverán la presencia del alumnado masculino en estudios en los casos en que se evidencie mayor matrícula de mujeres. Respecto a los currículos y los libros de texto y otros materiales educativos no contendrán estereotipos sexistas.
Aprobación del curso con asignaturas suspensas
La Ley modifica radicalmente el concepto de materias suspendidas. Es decir, el estudiantado promocionará de curso cuando el equipo docente apruebe que las materias no superadas le permite continuar con éxito el curso siguiente. Especificamente, promocionarán los que hayan alcanzado los objetivos de las materias o tengan calificación negativa en una o dos materias. Con esto, la permanencia en el mismo curso se considerará excepcional. Hay que destacar que el alumno permanecerá en el mismo curso una vez o dos veces- como máximo- en el transcurso de la enseñanza obligatoria.
Plazas en Infantil
Aumento de las plazas públicas 0-3 años. Promover la existencia de centros públicos que incorporen Infantil con otras etapas educativas.
Educación afectivo-sexual
Fomentar de manera transversal la educación para la salud, incluida la afectivo-sexual, desde Primaria.
Historia de la Democracia
Los alumnos deberán adquirir un conocimiento profundo de la historia de la democracia en España. Deberá plantearse desde una perspectiva de género.
Defensa del Planeta
Fortalecer las capacidades afectivas del alumno en sus relaciones con el planeta.
Certificación en Secundaria
Los alumnos recibirán al concluir ESO una certificación oficial con los años cursados y el nivel de las competencias.
Bachillerato
Se podrá hacer en tres años y también se contempla la posibilidad de que el equipo docente decida la obtención del título por el alumno que haya superado las materias salvo una.
Educación de Adultos
Podrán incorporarse a la educación de adultos los mayores de 16 años con contrato laboral o deportistas de alto rendimiento.
Alumnos sin cualificación
Las Administraciones podrán organizar programas formativos para mayores de 17 años sin cualificación, para permitirles un título de Formación Profesional o certificación académica.
Inspectores
La fase de concurso valorará la trayectoria profesional del candidato y sus méritos, mientras que la fase de oposición será una valoración de capacidades y no una prueba.
Educación especial
La educación especial ha solicitado también la eliminación de una disposición de la ley con el objetivo de cerrar estos centros. Según la ‘Plataforma Inclusiva Sí, Especial También’, esta disposición abre la puerta a que las comunidades autónomas vacíen los centros de educación especial de alumnos para, progresivamente, “transformarlos en centros de recursos, sin apenas alumnado”. El proyecto de ley se basa en que “las Administraciones educativas velarán para que las decisiones de escolarización garanticen la respuesta más adecuada a las necesidades específicas de los estudiantes.
Contratación de docentes sin máster específico
En esa línea, la ministra de Educación, Isabel Celaá, ha abogado por la contratación de profesorado sin máster específico. En su opinión la situación actual “obligaba” a reforzar las plantillas de manera urgente: “Ello puede implicar que, en algunos casos, ciertamente pocos, pero no desdeñables, no se disponga de candidatos suficientes idóneos. Y en este sentido, no resulta aceptable que haya grupos de estudiantes sin docentes”.
