De acuerdo a la batería de medidas restrictivas por el COVID 19 anunciadas por la presidenta del Govern, Francina Armengol, el sector más afectado seguirá siendo el de la restauración a lo que se suma el pequeño comercio y las grandes superficies.
Bares y restaurantes tendrán que echar el cierre a las 18h todos los días. Con la anterior normativa se cerraban las terrazas a las 22h en días laborales no vísperas de festivos o fines de semana.
La presión sanitaria sigue siendo elevada en Mallorca. La mandataría autonómica advirtió su preocupación, a tenor de las cifras en los últimos 14 días, cuya incidencia es de 607 casos por cada 100.000 habitantes.
Para Armengol, se trata de reforzar las medidas de hace dos semanas para evitar la relajación social y las aglomeraciones de público. Estas nuevas restricciones que serán publicadas el próximo martes en el BOIB, que se mantendrán hasta el 11 de enero, también afectarán al pequeño comercio y a las grandes superficies que tendrán que adelantar el cierre a las 20h, excepto los de actividad esencial como gasolineras, peluquerías y negocios de telecomunicaciones, centros de veterinaria y ópticas.
De la misma forma, los centros comerciales y las grandes superficies tendrán prohibido abrir en las próximas dos semanas hasta el 10 de enero. La capacidad de los aparcamientos quedará reducidos al 50 por ciento.
Con el anuncio de estas medidas, Mallorca se mantiene en fase 4 de alerta sanitaria. Armengol confirmó que el toque de queda seguirá hasta las 22h, pero recomendó a la ciudadanía apelar al sentido de responsabilidad y regresar a los domicilios a las 20h.
Respecto al resto de las Islas, el Consell del Govern determinó que Ibiza siga en fase dos; Menorca se mantenga en fase tres y Formentera suba a la tres debido al incremento de los contagios en las dos últimas semanas, llegando a los 586 casos por 100.000 habitantes.
