Es una de las áreas de Presidencia del Consell de Mallorca encargada de trabajar con las asociaciones de personas mayores de la Isla. A pesar de las adversidades del Covid-19 se sigue con las líneas de trabajo sociales en la medida en que la situación sanitaria lo permita. Entrevistamos a la directora insular de Promoció Sociocultural, Carolina Abad.
Baleares Sin Fronteras: ¿Cómo ha afectado la pandemia a las actividades que se realizan desde Promoción Sociocultural?
Carolina Abad: Concretamente, en la Dirección de Promoción Sociocultural, tenemos dos vertientes: una más dirigida a asociaciones de la tercera edad, que como todo el mundo sabe se han visto muy afectadas, y fueron las primeras que se interrumpieron; y por otro lado, actividades que podían hacer otro tipo de entidades de animación y promoción sociocultural, que se han visto también perjudicadas debido a las restricciones de aforo.
Al día de hoy, poco a poco se está intentando recuperar la normalidad con todo lo que marca la normativa sanitaria.
BSF: ¿Han notado una bajada en cuanto a las presentaciones de las convocatorias de subvenciones?
C.A.: Ha habido un descenso importante. Si hablamos de las convocatorias de animación y promoción sociocultural, podemos decir que se hizo un gran esfuerzo para que las entidades se hicieran eco de las diferentes convocatorias. De hecho, en este 2021, hubo más presentaciones de las solicitudes respecto a años anteriores.
BSF: ¿Se hicieron algunas actividades a nivel presencial el año pasado?
C.A.: Prácticamente ninguna. Las que se hicieron, fueron casi en su totalidad de forma telemática, y sabemos que no tienen el mismo alcance. Se ha notado una diferencia notable este año respecto a otros.
Esperamos que de cara al año que viene, cuando se lance una nueva convocatoria, como cubrirá todo lo que se haya hecho a partir de 2021, se volverá a remontar ya que hace meses se están reiniciando diferentes actividades y varias iniciativas que requieren del contacto con la gente.
BSF: ¿Cómo funcionan los clubes de la tercera edad?
C.A.: Para ellos tenemos varias líneas de subvención. Hay algunas que no se han visto afectadas, como son el mantenimiento de las entidades y el alquiler de locales, pues la mayoría de ellas no disponen de locales municipales, y desde el Consell se subvenciona parte de dicho alquiler.
Esas líneas no se han visto prácticamente modificadas. Las que sí se han visto perjudicadas han sido las actividades, debido a la normativa que afectaba a los mayores por ser colectivo de riesgo. Desde marzo de 2020 hasta hace pocos meses, en que algunos han podido hacer ciertas actividades de forma presencial, e incluso algunas pocas que las han hecho de forma telemática.
BSF: ¿Se está en permanente contacto con los diferentes representantes de las asociaciones de mayores, cuál es la percepción?
C.A.: Sí, hay contacto. Ahora mismo hablaría más de prudencia. Es normal que durante los meses anteriores ha habido mucho temor.
Vamos a tener que estar atentos sobre cómo se reacciona desde ese colectivo, ya que quizás hará falta algún tipo de intervención a nivel psicosocial, con ayuda de otros departamentos para que estos colectivos retomen las actividades sin miedo.
El conocimiento es un gran revulsivo del miedo. Y la idea es darles todas las herramientas para que sepan cómo prevenir, cómo protegerse, y con eso poder paliar ese sentimiento de temor. También se les ha ido enviando todo tipo de información de la normativa que ha ido saliendo y se ha hecho una guía de recomendaciones, además de vídeos con consejos y otros materiales que serán de utilidad.
BSF: En estos difíciles tiempos, ¿qué radiografía hace del tejido asociativo de la tercera edad?
C.A.: Sí que hemos tenido algún problema con alguna de las asociaciones, pero ha sido minoritario. Han podido ser asociaciones que arrastraran algún problema de tipo económico, o de la propia junta directiva, y con la pandemia y el confinamiento la situación no ha hecho más que empeorar esos problemas. Pero en términos generales el balance es positivo.
BSF: ¿Cuántas asociaciones de la tercera edad existen en Mallorca?
C.A.: Hay 179 asociaciones. Aproximadamente unas 87 estarían en Palma y el resto en los todos los municipios de Mallorca.
BSF: Hay una serie de actividades que se están realizando en Inca y en la Part Forana, ¿En qué consisten?
C.A.: Estamos haciendo actividades que van dirigidas a todo tipo de público. En estos meses de verano, intentamos aprovechar esos centros que tenemos en Inca y en Manacor, y ponerlos a disposición de la ciudadanía.
Las primeras actividades que hemos hecho han funcionado bastante bien y han sido muy bien recibidas. Se trata de talleres intergeneracionales, en los que se han planteado actividades de juegos de ‘ayer y hoy’, bailes de nietos con sus abuelos. Ahora estamos preparando otra actividad que irá dirigida a usuarios de ‘Proyecto Hombre’ que consistirá en un taller de música. Lo haremos durante el mes de julio, aunque ya estamos preparando otras.
BSF: ¿Qué previsiones hay del trabajo que se puede hacer próximamente en cuanto a la tercera edad?
C.A.: De cara al corto plazo tenemos que trabajar en animarles a retomar las actividades, aunque sea a partir del mes de septiembre, pero hay que comentar que la mayoría tienen esas ganas de volver a la rutina. En definitiva, debemos mantenernos activos y no dejarnos derrumbar por la actual coyuntura.
BSF: ¿Un mensaje final?
C.A.: Debemos seguir adelante y tenemos que aprender de todo lo que esta situación nos ha traído, que es ir día a día, desarrollando la capacidad de improvisación. No nos queda otro remedio.