José María Liu es el actual embajador de Taiwán en España, desde noviembre de 2018. Al no contar este país con reconocimiento por parte de España como entidad nacional, el país asiático tiene una ‘Oficina Económica y Cultural de Taipei, España’, que funciona como tal.
Baleares Sin Fronteras: Una breve introducción a Taiwán, para que lo conozcamos mejor.
José María Liu: La República de China (Taiwán) ocupa un territorio de 36.000 km2 – algo menor que Extremadura –, está situada en el Pacífico Occidental, entre Japón y Filipinas, y tiene 23,5 millones de habitantes. Se trata de un estado de derecho, convertido hoy en una de las principales economías del mundo. Nuestra sociedad es libre, plural y vitalista y nuestro sistema político es modelo de democracia para muchos de nuestros países vecinos.
En enero de 2020, Taiwán celebró sus elecciones presidenciales, y nuestra presidenta, TsaiIng-wen, revalidó su mandato por un periodo de cuatro años más. Somos considerados como uno de los países más seguros del mundo, con una tasa de criminalidad extremadamente baja. El pueblo taiwanés y su Gobierno tienen abanderados valores universales tales como la libertad, la democracia y los derechos humanos, así como los principios básicos de honestidad y transparencia.
BSF: ¿Cuáles han sido sus prioridades de actuación desde que fue nombrado embajador en España y cómo son actualmente las relaciones entre España y Taiwán?
J.M.L.: Mi principal objetivo desde que llegué a España ha sido conseguir que ambos países nos conozcamos mejor y que intensifiquemos nuestras relaciones en todos los ámbitos. Por ello hemos puesto el acento en incrementar la presencia de Taiwán en medios de comunicación, para que el pueblo español pueda conocer quiénes somos y qué hacemos los taiwaneses. Más aún en los últimos meses, cuando Taiwán se ha distinguido y ha sido reconocido por todo el mundo como uno de los países que mejor han gestionado la covid-19. Queremos aportar nuestra experiencia al resto del mundo y, por supuesto, también a España, respondiendo a nuestros lemas de “Taiwán puede ayudar” y “Taiwán está ayudando”.
En el terreno cultural, España y Taiwán somos dos países que nos caracterizamos por nuestro enorme potencial y riqueza en este sector, lo cual nos ha permitido intensificar nuestros intercambios. En asuntos educativos, convocamos anualmente becas para facilitar que estudiantes e investigadores puedan viajar a Taiwán que gozan de excelente acogida entre los españoles. Tratamos de que las presiones de China no influyan en nuestras relaciones con España, país con el que compartimos valores universales como la libertad, la democracia y el respeto por los derechos humanos.
BSF: ¿Cuál es el peso de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países? ¿Qué interesa en Taiwán de España?
J.M.L.: Durante 2020, el volumen comercial entre España y Taiwán alcanzó la cifra de 1.789 millones de dólares estadounidenses. Taiwán exportó a España por valor de 1.037 millones de dólares e importó de España por valor de 752 millones de dólares. Taiwán goza de un superávit de 285 millones que estamos tratando de equilibrar mediante las exportaciones agropecuarias e industriales de España.
Damos especial relevancia al sector agroalimentario español, aprovechando que su país es líder en “productos estrella” que gozan de gran aceptación en Taiwán, como la carne de cerdo, el aceite de oliva y los vinos. En la actualidad, España ocupa el número 2 en el ranking mundial de exportación de aceite de oliva a Taiwán, el número 3 en exportación de carne de cerdo y el número 5 en exportación de vinos. En los últimos meses, y mientras la pandemia nos lo ha permitido, hemos incrementado las visitas y los contactos con empresarios de diferentes regiones de España para continuar explorando posibilidades de promoción comercial.
Además de vehículos y medicamentos, que son las principales exportaciones de España a Taiwán.
BSF: ¿Y qué puede ofrecer Taiwán a España?
J.M.L.: Nuestro liderazgo en alta tecnología nos hace ser un socio cada vez más atractivo para otros países, sobre todo en la producción de semiconductores. La industria de Taiwán tomó enseguida conciencia de la importancia de los semiconductores en el mercado global, donde cada vez un mayor número de los objetos cotidianos que utilizamos a diario, como los teléfonos móviles, los ordenadores o los coches, y otros no tan cotidianos pero también imprescindibles como los satélites y aviones, necesitan de los semiconductores para su funcionamiento. Y es ahí donde se ha especializado Taiwán, con la compañía Taiwan Semiconductor Manufacturing Company (TSMC) a la cabeza.
Taiwán ocupa hoy el 63 por ciento del mercado mundial de chips. Solo la empresa TSMC, el gigante tecnológico de Taiwán, copa el 54 por ciento del mercado global. Nos hemos convertido en el principal actor global y en la pieza clave de la cadena de suministro de semiconductores en todo el mundo. La importancia de Taiwán se acentúa hoy cuando la escasez de semiconductores ha provocado el retraso en la fabricación de 500.000 vehículos en todo el mundo, lo cual podría alargarse hasta 2022, según los pronósticos del sector. Y en España la crisis del sector de los semiconductores ha llevado al ERTE a 40.000 trabajadores del automóvil.
BSF: ¿Cómo ha vivido Taiwán la pandemia de la covid-19? ¿Cuáles han sido las claves para la recuperación?
J.M.L.: Taiwán ha sido considerado como uno de los países que mejor han gestionado la pandemia en todo el mundo. El llamado “modelo de Taiwán” se ha sustentado en cinco claves: experiencia, pues ya sufrimos otra epidemia similar, la del SARS, en 2003; rapidez de respuesta, porque establecimos de inmediato control de fronteras; aplicación de la tecnología moderna, porque nuestro Gobierno creó un efectivo Big Data para detectar casos sospechosos y utilizó el GPS para controlar y proporcionar apoyo a las personas que necesitaban hacer cuarentenas; transparencia, porque hemos mantenido a la población bien informada, y colaboración ciudadana, porque la población ha respondido con aceptación y eficacia ante tales medidas necesarias.
Los taiwaneses hemos sabido poner en la balanza nuestras libertades individuales y nuestra seguridad sanitaria, inclinándonos hacia esta última, pero siendo conscientes de que a largo plazo el resultado final va a ser favorable para todos. Aun así, el pasado mes de mayo comenzaron a incrementarse notablemente el número de casos de covid-19 en Taiwán.
A día de hoy contamos con un total de 15.535 casos registrados desde el inicio de la pandemia y 784 fallecidos. Hemos vuelto a responder con rapidez a este incremento enfatizando o adoptando nuevas medidas, como el estricto control de fronteras, el uso obligatorio de mascarillas, la prohibición de servir comida en restaurantes, la suspensión de actividades religiosas o la limitación de reuniones, hasta cinco personas en interiores y diez en exteriores. Gracias a la positiva evolución de los últimos días, a partir del 27 de julio comenzarán a suavizarse estas restricciones en todo el país. En cuanto a la campaña de vacunación, estamos acelerando el proceso y prevemos que a finales de julio esté vacunado con la primera dosis el 25 por ciento de la población.
BSF: ¿Cómo ha afectado la pandemia de la covid-19 a la economía de Taiwán?
J.M.L.: Durante 2020, la actividad económica de Taiwán apenas se vio afectada por la covid-19. Gracias a la óptima gestión de la pandemia desde el principio, no hemos tenido necesidad de confinar a la población, ni de cerrar empresas, comercios o negocios. Aun ahora, con las nuevas y más estrictas medidas adoptadas, hemos evitado recurrir al confinamiento de la población.
Nuestra economía cerró 2020 con un crecimiento del 3,11 por ciento, convirtiéndonos en la economía de mejor desempeño de Asia. Y para el año 2021, el pronóstico de crecimiento es del 5,46 por ciento. Taiwán es en la actualidad la 17ª potencia económica del mundo. Con una economía orientada básicamente hacia las exportaciones, somos el 15º mayor exportador y el 18º mayor importador mundial. Ocupamos el 6º lugar en el Índice de Libertad Económica y el 8º en el ranking de Competitividad Mundial, y el tercer puesto entre los mejores destinos para inversiones del mundo.
BSF: Está Taiwán pensando ya en la reapertura del turismo? ¿Qué atractivos ofrece Taiwán al turista internacional?
J.M.L.: A día de hoy, en Taiwán contamos todavía con un control estricto de fronteras, más ahora con la expansión mundial de la variante Delta. Aun así, no hemos dejado de prepararnos para recibir turistas de todo el mundo en cuanto la situación sanitaria a nivel internacional permita restablecer los viajes con normalidad. La isla de Taiwán fue descubierta por los navegantes portugueses en el siglo XVI y bautizada por su belleza como “Isla Formosa”. Continuó siendo un foco de interés para los pueblos navegantes en siglos posteriores, y los españoles se asentaron en el norte de la isla en el siglo XVII (de 1626 a 1642), estableciendo la Gobernación de Formosa Española. Todavía hoy queda la huella española en los nombres de algunas ciudades y pueblos de Taiwán, como San Salvador, Santo Domingo, San Lorenzo y Santiago, que en la actualidad se conoce con su nombre adaptado a la fonética del chino mandarín: Santiaochiao.
El turista debe conocer la fascinante naturaleza de la isla, sobre todo las montañas, con 272 picos que superan los 3.000 metros por encima del nivel del mar. Nuestra riqueza gastronómica, nuestras tradiciones y nuestros tesoros culturales, como el Museo Nacional de Palacio, que posee la mayor colección de arte chino de todo el mundo. Y experimentar la vida espiritual de Taiwán, donde existe una absoluta libertad de culto y gentes de todo tipo, edades, condición y creencias se dan cita en los numerosos templos, iglesias y mezquitas repartidos por toda la isla. Antes de la pandemia, casi 12 millones de turistas visitaban anualmente Taiwán, 400.000 de ellos procedentes de Europa, de los cuales más de 14.000 eran españoles.
Por su parte, más 17 millones de taiwaneses viajaban anualmente por el mundo, 363.000 con destino a Europa y 18.000 de ellos a España. Esperamos que, una vez superada la pandemia, podamos potenciar todavía más el turismo entre ambos países y dar a conocer más en Taiwán España y sus islas, sobre todo las Baleares, como destino.
BSF: ¿Cuáles son los destinos favoritos de los taiwaneses para sus vacaciones? ¿Podría atraer Baleares como destino turístico al público taiwanés?
J.M.L.: A los taiwaneses nos encanta viajar a los lugares que tienen historia. Por eso Europa y España están entre nuestras preferencias. De España lo que más visitan los taiwaneses es Madrid, Barcelona, Santiago de Compostela y Toledo, por su atractivo histórico y cultural, así como toda la Comunidad de Andalucía (Sevilla, Granada, Córdoba, Cádiz…), sobre todo por conocer sus tradiciones. En cuanto a las islas Baleares, al ser Taiwán una isla nos sentimos atraídos por el carácter insular, por la belleza de sus playas y paisajes y por su tranquilidad.
El turismo de crucero cuenta cada vez con más adeptos en Taiwán, y las Baleares son uno de los destinos que no pueden faltar en los circuitos por el Mediterráneo y que permiten disfrutar de la visión de la Catedral de Palma de Mallorca, uno de los monumentos más bellos que se pueden admirar en España. Mallorca también es muy conocida en Taiwán por la celebración de la popular carrera ciclista Mallorca 312-Giant-Taiwan, que este año tiene previsto celebrar su undécima edición en octubre, y que cuenta con el patrocinio de la famosa marca de bicicletas taiwanesa Giant. Estoy seguro que en cuanto la situación sanitaria a nivel internacional se normalice, serán cada vez más los taiwaneses que elijan las Islas Baleares como destino.
BSF: ¿Qué cree que puede atraer de Baleares al público taiwanés? ¿Tiene organizado algún viaje para poder conocer mejor las islas?
J.M.L: Seguramente voy a ir a Baleares, para poder saludar personalmente a Alex. Eso sin duda alguna.
Para los turistas taiwaneses, a mi juicio, se sienten cada vez más atraídos por las islas, ese tipo de paisaje. Hoy en día está de moda ese tipo de viaje. Después de la pandemia, sí o sí van a visitar las Islas.
BSF: ¿Está creciendo el interés en aprender español en Taiwán?
J.M.L: Siempre he dicho que para el siglo XXI los tres idiomas más importantes del mundo son: inglés, español y chino. Por eso en Taiwán crece el número de alumnos que se interesan por aprender el español.
Yo aprendí español hace más de 40 años. En aquel momento, en Taiwán solamente había dos universidades que contaran con departamento de español. Y tras tantos años de haberlo aprendido, este idioma se ha convertido en una parte importante de mi vida.
El español o el chino ya no son un obstáculo. Las personas de cada vez se sienten más atraídas por aprender un idioma extranjero, y eso es lo que está pasando tanto en España como en Taiwán.
BSF: ¿Un mensaje final?
J.M.L.: Querría pedir a nuestro Dios del cielo que nos dé más bendiciones a todos, sobre todo al pueblo español y taiwanés. Y que desaparezca esta pandemia lo más pronto posible para que podamos volver a la normalidad que conocíamos.