Las cinco playas del término municipal de Palma han recibido la certificación “Safe Tourism”, que otorga el Instituto para la Calidad Turística Española, una vez superada la auditoría y garantizado el cumplimiento de las exigencias de prevención de riesgos, que convierten las playas de Cala Mayor, Ciudad Jardín, Can Pere Antoni, Cala Estància y Playa de Palma, en destinos seguros para todas las personas usuarias.
Como reconocimiento de esta certificación obtenida, se han izado en las 5 playas la bandera correspondiente a la distinción “Safe Tourism”, que las playas del municipio de Palma reciben por primera vez.
Se trata de una certificación que reconoce el cumplimiento de la normativa UNE ISO / 5643:202, que establece los requisitos y recomendaciones para prevenir el contagio por el coronavirus SARS-CoV-2, para proteger tanto personal trabajador como usuario, prestando los servicios para turistas y residentes de forma segura.
Corresponde a una nueva norma elaborada en base a los protocolos de prevención de riesgos elaborados por el Instituto de Calidad Turística Española (ICTE), de acuerdo con las recomendaciones de la Secretaría de Estado de Turismo del Minsiteri de Industria, Comercio y Turismo.
El proceso de certificación supone superar una estricta auditoría de cumplimiento de una serie de medidas. Las playas de Palma superaron la auditoría realizada el mes de junio realizada por el organismo de certificación independiente SGS INTERNATIONAL SERVICES CERTIFICATION S.A.Uno.
Esta certificación acredita que los servicios de las playas de Palma cuentan con medidas como por ejemplo:
· Medidas generales de prevención, existencia de plan de contingencia, información, limpieza y desinfección…
· Medidas de control de aforo y control de los puntos de acceso.
· Servicios auxiliares y complementarios que cumplan los requisitos de seguridad y prevención establecidos (baños públicos, restauración, etc.).
Precisamente el protocolo de control de aforo e información a los usuarios ha sido uno de los aspectos más valorados en las playas de Palma, que ha permitido abordar de forma satisfactoria las situaciones de aforo próximo al máximo permitido, especialmente en la playa de Cala Mayor. La información a los usuarios y el control a los accesos ha permitido no llegar al límite del aforo previsto.
Todo ello hace que las playas de Palma hayan merecido esta distinción que reconoce las medidas de control, seguridad e información para prevenir la expansión de la còvid-19.