La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha visitado hoy el dispositivo de control sanitario del aeropuerto de Son Sant Joan para agradecer la tarea a todas las personas que han hecho posible este y el resto de controles que se han llevado a cabo a los puertos y aeropuertos de las Islas. Este servicio, que se inició el 5 de diciembre del 2020, finalizará mañana a medianoche.
Armengol ha destacado que su trabajo ha sido «impecable», así como la actitud «siempre muy receptiva y pedagógica de las personas que han llevado a cabo la que ha sido una de las medidas más importantes de nuestra comunidad autónoma» en la lucha contra la pandemia. Esta medida, tal y como ha indicado la presidenta, tenía dos objetivos muy claros: «garantizar la seguridad de la ciudadanía y mostrarnos como una comunidad segura».
La presidenta ha recordado que las Baleares es la única comunidad que ha hecho efectivos estos controles con personal público, unas plantillas que a partir de la navidad del 2020 se estabilizaron «a través de la contratación muy rápida y diligente de personal que recibió formación específica». Hoy, la retirada de estos controles «es una buena noticia porque significa que estamos mejor y que podemos tener una movilidad segura».
Este operativo de control de la COVID-19 para proteger la población durante las diversas oleadas de la pandemia —cuando la incidencia de la enfermedad era más alta— y para garantizar una movilidad segura de la población entre las diferentes comunidades autónomas ha supuesto un coste para el Servicio de Salud de aproximadamente 8,3 millones de euros durante los once meses de funcionamiento.
Durante este tiempo Salud ha hecho 824.614 controles a los puertos y aeropuertos (487.252 en Mallorca; 109.927 en Menorca; 206.269 en Eivissa y 21.166 en Formentera). En estos se han detectado 308 tests de antígenos positivos (179 en Mallorca; 24 en Menorca; 101 en Eivissa y 4 en Formentera). Estas cifras suponen que desde el mes de diciembre de 2020, gracias a los controles efectuados, se han cerrado 1.540 cadenas de contagios de la COVID-19.
Desde que empezó el operativo, 287.102 pasajeros han llevado su PCR hecha en origen. 5.443 pasajeros han acudido al COVID-Express, mientras que 10.264 pasajeros han optado por el aislamiento. Además, 282.625 personas han estado exentas de presentar o someterse a ningún tipo de prueba. Se trata de pasajeros que han estado menos de 72 horas fuera de las Illes Balears o tripulaciones, deportistas federados, transportistas, viajeros entre islas y menores de 6 años, una edad que posteriormente se amplió a los 12 años.
La Consellería de Salud y Consumo ha optado por desactivar estos controles en los puertos y aeropuertos para los pasajeros provenientes del resto del Estado teniendo en cuenta el alto índice de vacunación en España —el 78 % de la población tiene la pauta completa— y la bajada de la incidencia acumulada a catorce días, que ayer era de cerca de 50 casos por 100.000 habitantes
