Siguiendo con la campaña “Local 100%” de 2020, este año el Consell de Mallorca y PIMEM han aplicado una pequeña variación al eslogan: “Producte local és futur”. Tanto la institución mallorquina como la patronal quieren transmitir, a través de una serie de productos y de unos niños como modelos, la necesidad de pensar que el consumo local puede dar mucha fuerza a la industria mallorquina. Se trata, según PIMEM, «de tomar conciencia de que si la industria tiene fuerza, se mantienen puestos de trabajo y, de cara a un futuro, diversificamos y damos oportunidades a los jóvenes que puedan trabajar en otros sectores que no sean sólo el turismo».
El consejero ejecutivo de Promoción Económica y Desarrollo Local, Jaume Alzamora, ha asegurado que “promocionar la economía local es condición imprescindible para un desarrollo sostenible de nuestra isla, ya que contribuye a crear puestos de trabajo dignos y oportunidades para todos, e implica una producción y consumo con menor impacto medioambiental. Estos son objetivos de la Agenda 2030 que Mallorca no puede dejar de lado». Por ello, ha remarcado que “la colaboración entre el Consell y PIMEM es clave, porque estos objetivos requieren la implicación de todos y todas, y las alianzas entre agentes”.
Por su parte, el presidente de PIMEM, Jordi Mora, ha asegurado que con esta otra edición de la campaña “se da continuidad a una idea troncal dentro de la patronal: apoyar la producción local no únicamente como un objetivo de solidaridad, sino de convicción y firmeza de que es lo mejor y lo necesario para seguir diversificando nuestra economía».
El Departamento de Marketing y Comunicación de PIMEM y la agencia de Manacor Disstint aseguran que la campaña quiere conectar el producto de Mallorca (mediante unos determinados productos por la imposibilidad de que salgan todos) y el futuro representado por un niño contento de poder compartir estos elementos y disfrutarlo, en este caso, a través del juego. El periodista y responsable de comunicación de PIMEM, Joan Vives, asegura que «desde el principio, tuvimos claro que teníamos que superar la tristeza y el ambiente gris que había provocado la pandemia. Tampoco queríamos comunicar penas, ni pedir solidaridad. Queríamos transmitir la potencialidad de futuro que tienen nuestros productos y que, con la concienciación de consumo local, serán nuestros hijos o nietos los que se beneficiarán».
La campaña consta de ocho fotografías, en las que se representan el sector agroalimentario, de la moda, ceramista e industrial, y se llevará a cabo durante los días que quedan de noviembre y durante todo el mes de diciembre. El proyecto recibe el apoyo del Consell Insular por la contribución a la promoción de la economía de Mallorca, en el marco de la convocatoria de subvenciones de 2021.