El próximo 18 de junio el Baleares Sin Fronteras Fútbol Club vivirá un día muy especial en sus once temporadas de vida: su primer partido amistoso intercomunitario, ante la Unió Esportiva Sant Miquel de Campmajor, equipo de la provincia de Girona, y la comarca del Pla de l’Estany, que milita en la Cuarta Catalana.
Toda historia tiene su protagonista, y en esta ocasión es uno de los porteros de la presente temporada: Ivan G. Humet, catalán de origen pero mallorquín de adopción. Natural de Banyoles (Girona) llegaba a tierras mallorquinas con 21 años y a partir de ahí su paso por el Atlètic Santa Eugènia, Juventud Son Oliva, Sporting Sant Marçal, La Unión, Son Verí, y estos momentos Baleares Sin Fronteras FC.
“La verdad que e mente abrumado por lo que se ha formado y lo que se está preparando para el 18 de junio”, afirma Humet.
El portero recuerda su etapa en el Sant Miquel como una muy bonita y de gran aprendizaje. Y pone de manifiesto el gran trato, en lo humano y futbolístico, que recibió en el equipo. “Siempre donde he estado, me he sentido muy a gusto, pero ese año que milité en el Sant Miquel fue muy especial”.
El fútbol es un deporte en el que se aprenden muchas cosas, y se dio cuenta Ivan Humet, que comenta que el estar en ese club le permitió ser agradecido con todas las personas que se dedican al fútbol, sobre todo en categorías modestas, por el trabajo incansable que hacen y por la calidad humana.
La conexión para que se haya dado este partido ha sido la Humet-Darné. Ferran Darné fue una de las piezas claves en la estancia del portero en el conjunto gironí y con el que tiene una amistad de muchos años.
Este mundo también da pie a cientos de anécdotas, y su caso no es una excepción. Un gol de portería a portería. Un vuelo desde Londres a las 12h y una llamada para decir: “tranquilo que llego al entreno”. Momentos, algunos, que solo se pueden experimentar en el fútbol modesto.
Otro caso que cuenta el portero banyolí de su experiencia en el Sant Miquel de Campmajor es el de jugadores que ya no tenían ficha, pero que continuaban yendo a los entrenos para no perder el vínculo con el equipo y ese ambiente de familia.
Ferran Darné (1965) es el tesorero y entrenador de la Unió Esportiva Sant Miquel de Campmajor y ha sido uno de los promotores de esta “locura tan bonita”, en palabras suyas.
Un club, la UE Sant Miquel de Campmajor que inició su andadura futbolística federada en el año 1978, y de los cuales Ferran lleva 39 años en este equipo.
La larga amistad que une a Ferran y a Ivan, y las conversaciones que mantienen a lo largo del año hizo que el pasado invierno el técnico catalán llamara a Mallorca.
“Antes de navidades se me ocurrió la idea de comentarle a Ivan si le haría ilusión que fuésemos a visitarlo, pero no solo yo, si no que tenía claro que mínimo seríamos un buen grupo”, comenta Darné.
Ambos se emplazaron para volver a hablar del tema cuando mejorara la situación provocada por la pandemia, y desde entonces todo ha sido preparación y mucha colaboración.
La sorpresa fue cuando se dio cuenta que todo el equipo se apuntaba a esta aventura. Por tanto, los preparativos aumentaban en complejidad. “Para poder sufragar los gastos del desplazamiento, alojamiento, entre otros, que ascienden a unos 320 euros por personas, hemos diseñado unas camisetas conmemorativas, y cada jugador tiene que vender al menos 10”, afirma el entrenador del equipo de Cuarta Catalana.
Sin duda, un día muy especial para muchos y que esconderá más de una sorpresa y, sobre todo, en el que se respirará un ambiente muy futbolero.