De los problemas y necesidades legales y burocráticas de los colectivos inmigrantes poco se habla en los medios locales.
En nuestro informe de cinco páginas de esta edición hemos evaluado la situación real de las doce comunidades latinoamericanas más numerosas que residen en Baleares.
Dentro de los aspectos positivos nos encontramos que las colectividades más numerosas en el archipiélago tienen representación oficial designadas por los gobiernos de sus respectivos países, tales como Argentina – aproximadamente 30 mil – Colombia – se aproxima a la cifra de los 25 mil – y Ecuador que superaría los veinte mil residentes en las Islas.
Afortunadamente los cambios de gobiernos en estos tres países no han tenido incidencia para que se eche el cierre a las sedes consulares. Esperamos que con la llegada del nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, el consulado continúe prestando normalmente la atención al público.
La otra cara de la moneda está por el lado de los venezolanos y paraguayos que tienen una nula asistencia consular. A los ciudadanos de esos dos países les toca aprovisionarse de más de trescientos euros para viajar a la península con el fin de realizar una gestión consular.
Los venezolanos – que ascienden a 8 mil afincados debido a la masiva llegada en estos últimos cinco años – hasta donde recordamos nunca han tenido una visita de un consulado itinerante a las islas, y lo peor, a tenor de los testimonios que recogemos la atención es pésima en plazos y resolución de los documentos, especialmente en los pasaportes que después de pagarse con tarjeta de crédito se presentan eternos retrasos en la entrega, e incluso, a veces el sistema informático no registra el pago de las gestiones. La última medida ha sido exigir dinero en efectivo para el abono de los derechos consulares, tal y como se refleja en la web del consulado de Barcelona.
La comunidad paraguaya supera la barrera los cinco mil residentes en las Islas. La única noticia reciente que se tiene es que se realizó un consulado móvil en Ibiza, pero en Mallorca que se recuerde nunca ha viajado ninguna delegación consular para hacer trámites. Desde esta redacción nos comunicamos con el contacto oficial de WhatsApp del consulado y nos indicaron que se tiene prevista una visita a la isla.
Los cubanos y chilenos del archipiélago se encuentran prácticamente en la misma situación. Los primeros reciben cada seis meses una visita del consulado, mientras que los sudamericanos aunque tienen cónsul honoraria en las islas, también deben esperar un semestre para que se programe la atención consular desde Barcelona.
A los peruanos y dominicanos se les puede añadir en el mismo contexto, pues tienen la ventaja de tener un consulado honorario donde hacer sus trámites. Los ciudadanos de este último país dependen de la jurisdicción de Valencia. Y el consulado honorario de Perú está supeditado a Barcelona. Por lo menos, ambos tienen la ventaja de acudir a una oficina física o pueden solicitar una cita previa para ser atendidos presencialmente.
Aunque el viceconsulado de Bolivia cerró la oficina en Palma por disposición del Gobierno de ese país, lo cierto es que cada mes un consulado móvil de Barcelona se desplaza al Casal de Inmigrantes de Palma. Lo podríamos definir como una solución con paños de agua tibia, pero eso es mejor a cambio de nada.
Los brasileros cuentan con la colaboración de la Asociación de Amigos de Brasil en Baleares, que hace de puente con el consulado de Barcelona para gestionar los papeles. Y finalmente hay un descontento generalizado por el cierre de la oficina consular de Uruguay en Palma, nunca hubo un comunicado oficial en redes o medios de esta decisión. Hemos tenido acceso a una notificación del consulado de Barcelona en la que se confirma una visita de atención a los usuarios a mediados de septiembre.
Una radiografía de lo que ocurre a nivel consular en Baleares, unas son de cal, otras de arena y algunas comunidades están en un escalón medio, pero estas últimas no pueden hacerle frente a una emergencia debido a la situación de insularidad en la que nos encontramos.
