Una jornada de dos días, cinco talleres y 150 participantes, con vinculación directa con los servicios de acogimiento residencial de niños y jóvenes con medida de protección en Mallorca, son los principales ingredientes de la fórmula aplicada por el Institut Mallorquí d’Afers Socials con el objetivo de analizar, debatir, reflexionar y poner en común el presente y el futuro de la metodología de trabajo de todos los y las profesionales que trabajan en alguno de los 32 centros especializados en acogimiento de toda la isla, tanto públicos como concertados.
Las Jornadas de Acogimiento Residencial 2022, organizadas por la Dirección Insular de Infancia y Familia del IMAS y celebradas hoy y mañana en las instalaciones de la Casa Weyler de Amadip Esment, son un punto de partida en la búsqueda de nuevas vías de trabajo para explorar relacionadas con el entorno seguro, la preparación para la emancipación, la intervención familiar desde el acogimiento residencial, el buen uso de las tecnologías o la atención a la salud mental. Cinco conceptos que marcan también los ejes básicos de cada uno de los talleres que se han organizado de forma simultánea durante todo el día de hoy.
Según Mari Ángeles Fernández, directora insular de Infancia y Familia, “son unas jornadas muy colaborativas y participativas. Buscamos que todo el mundo, tanto los profesionales como los niños y jóvenes que forman parte de nuestros programas de acogida residencial, aporten sus experiencias, ideas, propuestas de mejora, dudas o detecciones de carencias con el objetivo de mejorar y hacer más efectivo el servicio, pensando, siempre, en la protección, seguridad y bienestar de ese sector de la población tan vulnerable».
En los talleres, todos ellos con una marcada base formativa, se planteará a los participantes, dándoles voz, qué es lo que creen que se está haciendo bien, qué cambiarían, qué dejarían de hacer, qué dudas tienen o qué iniciativas piensan que podrían funcionar para optimizar el servicio y hacer más efectivas las políticas sociales desarrolladas en ese sentido. Hoy es día para el trabajo en equipo, para el diálogo y para escuchar iniciativas y propuestas; mañana la jornada estará dedicada a analizar y presentar las conclusiones.
Aunque la prioridad del IMAS es, siempre, promover el acogimiento familiar para dar a niños y jóvenes un entorno lo más normalizado posible, en algunos casos esta opción no es factible y debe recurrirse a la acogida residencial.
Hoy en día, Mallorca cuenta con 32 centros de acogimiento residencial para personas menores de edad con medida de protección, donde conviven un total de 346 niños y jóvenes. Todos los centros, privados y concertados, son de reducidas dimensiones, de una media de 8 plazas, lo que facilita que la atención que se recibe sea muy personalizada y familiar. «Unas medidas muy meditadas que se toman» según explica Mari Ángeles Fernández «pensando en el bienestar de los niños y niñas con el fin de que se sientan como su casa, protegidos y cómodos. De forma simultánea trabajamos directamente con las familias de origen de cara a la futura reunificación. Éste es nuestro objetivo principal, facilitar el retorno».
