Las Illes Balears han reducido un 53 % las emisiones de CO2 provenientes de la generación eléctrica respecto a 2018, pasando de 1.222.521 toneladas de CO2 en los primeros cuatro meses de 2018 a las 575.361 en el mismo periodo de tiempo en 2023.
La aceleración de la transición energética y la limitación de uso de los combustibles fósiles ha posibilitado el cierre de los grupos más contaminantes de las centrales como la Es Murterar, para así mejorar la calidad del aire que respira la ciudadanía y su salud.
El pasado mes de septiembre, las Illes Balears pusieron punto final a la utilización del fuel para producir energía eléctrica al cambiar su uso por gasóleo en los dos grupos diésel de la central térmica de Ibiza, dando así un paso más en el proceso de descarbonización de las Islas. Esta actuación se sumó a la puesta en marcha en julio de 2022 en la central térmica de Maó, que también dejó de usar fuel como combustible.
Con estas acciones, las centrales han dejado de consumir miles de toneladas de fuel cada año para reducir así la reducción de emisiones a la atmósfera. En palabras del vicepresidente del Gobierno y Consejero de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, Juan Pedro Yllanes, «las políticas de descarbonización del Govern funcionan y así lo demuestran los datos. Hoy respiramos un aire mejor en las Islas gracias a la acción de un Govern de coalición que mira por el bienestar de la gente y por su salud. Seguiremos desplegando políticas de transición energética para garantizar este bienestar en las Islas».
Por su parte, el director general de Energía y Cambio Climático, Pep Malagrava, ha explicado que «la reducción de horas de funcionamiento de los grupos más contaminantes, gracias a la apuesta de la ciudadanía por el autoconsumo y las nuevas instalaciones de renovables en toda Baleares, nos permiten lograr buenas cifras en reducción de emisiones. No obstante, el camino no acaba aquí y la emergencia climática nos empuja a seguir reduciendo de forma acelerada estas emisiones».
Menos emisiones en cuatro meses equivalente a siete años de circulación en la Vía de Cintura
Los primeros cuatro meses del año, las emisiones a la atmósfera por generación eléctrica se han reducido en 647.160 toneladas de CO2 respecto al mismo periodo de 2018. Esta cifra equivale a lo que contaminan todos los coches que circulan a lo largo de siete años por la Vía de Cintura de Palma.
Justo es decir, además, que respecto a 2022 en sólo un año se han reducido un 16 % las emisiones de CO2 del sistema eléctrico, el equivalente a la circulación de todos los coches que pasan por la Vía de Cintura en 15 meses.
«Desde el Govern seguiremos impulsando medidas para descarbonizar las Islas. Dejar de emitir emisiones, apostar por herramientas como el autoconsumo o impulsar la movilidad eléctrica son los ejes fundamentales de un Govern que cuida y protege sus ciudadanos», ha añadido Yllanes.