El Consell de Mallorca destinará un millón de euros a consolidar proyectos de economía social y solidaria mediante un plan específico del que podrán beneficiarse aquellas empresas, cooperativas, fundaciones o mutualidades que tengan una tienda abierta al público. La convocatoria también incluye a empresas de inserción, centros especiales de empleo, cofradías de pescadores y sociedades agrarias de transformación. La convocatoria de ayudas se ha dividido al 50 % entre entidades con y sin ánimo de lucro y permitirá a los beneficiarios obtener entre 5.000 y 60.000 €.
Este paquete de ayudas ha sido aprobado mañana por el Consell Executiu a propuesta del consejero de Promoción Económica y Desarrollo Local, Jaume Alzamora, y da continuidad a las convocatorias que se han hecho durante los últimos años. Al finalizar la reunión semanal del Consell Executiu Alzamora ha explicado que ésta es una de las líneas de ayudas más importantes de la institución insular y que “aprovechará para incentivar Inversiones que no sólo repercutirán en estas empresas y entidades, sino que además incidirán directamente en el conjunto de la sociedad”.
Acciones subvencionables
• Mejora de la eficiencia energética de la tienda, que podrá concretarse en cambios y adaptaciones de los mecanismos de instalación eléctrica y de gas; iluminación; suministro y evacuación de agua; equipos contra incendios; reducción de residuos y emisiones; conservación de alimentos; calefacción; refrigeración; aislamiento y ventilación.
• Mejora de las condiciones de accesibilidad universal en la tienda, entendida la accesibilidad como el conjunto de condiciones de comprensibilidad y usabilidad que deben cumplir los espacios, aparatos, dispositivos y mecanismos para que todas las personas los puedan utilizar y puedan disfrutar con ellos seguridad y comodidad y de la forma más autónoma y natural posible, de acuerdo con el marco legal previsto en la Ley 8/2017, de 3 de agosto, de accesibilidad universal de las Illes Balears
• Mejora del equipamiento y software tecnológico que permita una optimización de la comunicación con los clientes y proveedores y la implantación de sistemas de gestión más eficientes, como páginas web; plataformas de comercio electrónico; sistemas tecnológicos de optimización del inventario y el cobro. Las páginas web, plataformas de comercio electrónico y otros sistemas de información e intercomunicación con clientes y proveedores tendrán que estar disponibles al menos en catalán. Las páginas webs tendrán que estar alojadas en un dominio propio de la entidad.