El Govern de las Illes Balears, el Instituto Balear de la Mujer (IBDONA) y el Consell Insular de Mallorca han firmado este lunes un convenio para la creación de un centro de crisis de atención 24 horas a víctimas de violencia sexual en Mallorca.
La Ley orgánica 10/2022, de 6 de septiembre, de garantía integral de la libertad sexual, entre otras medidas, prevé la creación de los centros de crisis como unos servicios públicos interdisciplinarios de atención permanente que ofrecen asistencia a las víctimas de violencia sexual, a sus familiares y a las personas de la entorno a la víctima, mediante la puesta a disposición de una serie de servicios de atención psicológica, jurídica y social.
La firma, que se ha llevado a cabo en la sede del Consell Insular de Mallorca en el Palau Reial, ha tenido la presencia de la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad en funciones, Mercedes Garrido; la presidenta en funciones del Consell Insular de Mallorca, Catalina Cladera; conseller de Presidencia en funciones del Consell Insular de Mallorca, Javier de Juan, y la directora en funciones del IBDONA, Maria Duran.
La consellera Garrido ha detallado que «el Govern de las Illes Balears aporta 800.000 euros para la creación de este centro en Mallorca», y ha explicado que se distribuirán 1,5 millones de euros entre los consells insulares atendiendo al número de denuncias o procedimientos judiciales existentes desde el año 2019 y al resultado de la macroenquesta del Ministerio de Igualdad sobre violencia sexual. El objetivo es que haya centros de crisis en funcionamiento en las cuatro islas antes del 31 de diciembre. Este proyecto se enmarca en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea, Next Generation EU.
«Tenemos los recursos, tenemos los servicios y un convenio ya firmado para que Mallorca disponga de un centro específico para víctimas de agresiones sexuales. Lo que ahora toca es ejecutarlo, por eso estaremos vigilantes» ha apuntado la presidenta del Consell de Marllorca en funciones, Catalina Cladera.
El centro facilitará atención psicológica, jurídica y social para víctimas de violencia sexual, los familiares y las personas del entorno, así como atención telefónica, telemática y presencial las 24 horas del día, cada día del año, y de este modo se establece como una herramienta principal en la lucha contra la violencia machista, la primera de estas características en las Illes Balears.
El IBDONA desarrollará el servicio de 24 horas de atención telefónica y telemática, así como el servicio de acompañamiento a las víctimas de violencia sexual que lo soliciten directamente a este servicio. Así mismo, será el organismo encargado de las funciones de coordinación entre todas las islas y los consells insulares respectivos, con el objeto de garantizar la prestación de un servicio uniforme e igual en todo el territorio de la comunidad autónoma de las Illes Balears.
En concreto, se atenderán a mujeres mayores de dieciséis años víctimas y supervivientes de violencia sexual, tanto si la violencia se ha producido de manera reciente como en el pasado. Para acceder, no será necesaria la interposición de una denuncia y el enfoque estará centrado en la víctima.
Mujeres atendidas en cuatro años
Garrido también ha recordado la importancia de crear este tipo de centros, puesto que los datos de mujeres agredidas sexualmente así lo ponen de manifiesto. En relación con los casos de violencia, en cuatro años desde el IBDONA se han atendido a 1.028 mujeres, de las cuales 525 eran víctimas de violencia sexual dentro de la pareja y 504 víctimas de violencia sexual por un externo. En el mismo periodo, se ha acompañado a 395 mujeres a los juzgados o a interponer una denuncia.
El crecimiento ha sido exponencial, tanto en mujeres que han realizado alguna llamada, como en seguimientos a víctimas vulnerables y en acompañamientos. Así, del 2019 al 31 de mayo de este año, el incremento de las llamadas recibidas ha sido del 34,24 %, del 62,76 % en el caso de los acompañamientos y, en cuanto a la violencia sexual, se ha pasado de 83 llamas el 2019 a 267 el 2022, hecho que supone un incremento del 221,68 %.
