IMPULSA BALEARS ha reunido este mediodía a los miembros del Patronato, en la sede de CAEB para celebrar la segunda sesión ordinaria del año, bajo la presidencia de Carmen Planas y vicepresidencia, por vez primera, de Margalida Prohens. La sesión se ha orientado, principalmente, a revisar los avances del Plan anual de actuación 2023, entre los que destacan los relacionados con las actuaciones llevadas a cabo en materia de inversión responsable y economía circular.
Particularmente, las empresas e instituciones que forman parte del Patronato han ratificado la dedicación de esfuerzos a la actuación Sistema turístico circular, pues avalan la idoneidad de este tránsito como una apuesta de marcado calado estratégico para Balears. Uno de los principales motivos que conllevan a esta conclusión radica, tal y como ha expresado Carmen Planas, en que «implica de múltiples formas a todos los actores de las islas y al know-how que atesoran, independientemente de su tamaño y especialización productiva».
Para compartir y poner de relieve esta cuestión, IMPULSA BALEARS pone hoy en circulación un Pinball turístico, a través del que es posible visualizar y cuantificar el impacto que ejerce la demanda de consumo final de los no residentes sobre el tejido productivo balear. Así las cosas, tal y como resuelve Antoni Riera, director técnico de la Fundación, «cuando un turista formula una demanda por valor de un euro, directamente, 44 ramas distintas de nuestro tejido se ponen a producir, desde la agricultura a la industria y, por supuesto, los servicios. Si tenemos en cuenta, además, los efectos indirectos y el impacto total a través de las rentas que provoca esta demanda terminan implicadas 68 ramas de las 69 que conforman la estructura económica balear, por lo que incluyen todas las especializaciones, con un compromiso del 43,6% del valor de su producción anual».
El Pinball turístico, que ha sido diseñado y desarrollado en el seno de la Unidad de inteligencia económica, invita a los actores de las islas a jugar una partida en tres niveles distintos que muestran el impacto económico directo, indirecto y total que deriva de la creación y prestación de una experiencia turística en las islas, a partir de una explotación del marco input-output vigente. Así mismo, permite que los usuarios puedan extrapolar la partida a su rama de actividad y conocer, así, cuál es su masa crítica y el efecto que el hecho turístico tiene sobre su propia capacidad de producción.
El Pinball turístico, como solución adscrita a reN · Movimiento regenerativo para el futuro de Balears se orienta, explica Riera, a «demostrar que las barreras o fronteras sectoriales dejan de tener sentido cuando hablamos de apuestas sistémicas, como es el tránsito hacia un sistema turístico circular y, por tanto, persigue aglutinar el mayor número de actores desde el principio. Seguiremos trabajando en esta línea para facilitar la gobernanza de esta nueva estrategia de desarrollo, pues creemos que si nos dotamos de inteligencia y colaboración es abordable e implementable sobre el terreno en un periodo razonable de tiempo».