El Gobierno de España ha dado protección a 199.000 personas huidas de Ucrania en los dos años de guerra. El Ministerio de Inclusión Social, Seguridad Social y Migraciones, quiere mostrar su solidaridad con el pueblo ucraniano, coincidiendo con el segundo aniversario de la agresión de Rusia a Ucrania. “Hay efemérides que duele recordar, sobre todo cuando están tan presentes como la invasión de Rusia a Ucrania. España se mantiene firme con el pueblo ucraniano, del cual han llegado casi 200.000 personas, 61% de mujeres y 31% de menores”, ha manifestado Elma Saiz, ministra del ramo.
La Secretaría de Estado de Migraciones ha publicado algunos datos que ilustran de la respuesta del Estado español ante el conflicto. Una respuesta que, para la secretaria de Estado, Pilar Cancela, ha sido “ejemplar, demostrando una gran agilidad y capacidad de adaptación a las distintas circunstancias de la emergencia”.
Desde el estallido de la guerra, han sido más de 201.000 los ucranianos y, sobre todo, ucranianas, que han llegado a España. Actualmente, y gracias al “gran esfuerzo de coordinación” por parte de todas las administraciones, un total de 199.000 personas cuentan con protección temporal, lo que sitúa a España como el quinto país de la Unión Europea por número de concesiones. De las 199.081 personas afectadas por el conflicto en Ucrania con protección temporal en España, el 31,7% (62.447) son menores de 18 años, y el 61,2% (121.882) son mujeres. Además, hay que subrayar que, a fecha de hoy, en España hay 1.769 menores ucranianos no acompañados.
Los datos de la SEM reflejan, asimismo, que la población desplazada es mayoritariamente joven -31 años de media- y con estudios superiores -más del 60%-.
Otra de las características destacadas es el de la rápida integración de la población ucraniana a la sociedad española, ya que, por ejemplo, en la actualidad existen 29.500 menores escolarizados y 20.500 personas están trabajando -un 53% son mujeres-. De hecho, su incorporación al mercado laboral ha sido especialmente rápida, favorecida por el reconocimiento a trabajar con la protección temporal sin restricciones de ningún tipo, y apoyada en los CREADE (Centros de Recepción, Atención y Derivación) con unidades especializadas con Fundación CEOE, Seguridad Social y Servicios Públicos de Empleo. Hostelería, construcción y comercio son los sectores en los que se han empleado mayoritariamente las personas desplazadas. .
Principales intervenciones en dos años de guerra y crisis humanitaria
Desde que un 24 de febrero de 2022 estalló la guerra en Ucrania, el Gobierno de España ha trabajado intensamente en atender la crisis humanitaria generada por dicho conflicto. Así, la respuesta inicial se centró en documentar y atender a las más de 8.000 personas que llegaban a España cada semana, agilizando, a través de una Orden Ministerial, los trámites para conceder la protección temporal en 24 horas o adoptando medidas urgentes, por Real Decreto, en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en ucrania, con fondos específicos para la atención a desplazados con motivo de la guerra.
La apertura de los cuatro CREADE en las primeras semanas -duplicando la capacidad del sistema de acogida en pocos días- resultó fundamental, como pone de manifiesto la Secretaría de Estado de Migraciones, para poder entregar la documentación y dar acogida de emergencia a estos miles de personas que llegaban cada semana. Estos centros se ubican en los lugares donde residía un mayor número de población ucraniana antes de la emergencia: Madrid, Barcelona, Alicante y Málaga, y ofrecen protección temporal, acogida y derivación por inclusión y tramitan número de Seguridad Social, tarjeta sanitaria, orientación laboral y asesoramiento jurídico. En total, han sido más de 175.000 las personas atendidas y a día de hoy permanecen alojadas en el sistema de acogida español unas 14.000 personas.
La experiencia previa del sistema de acogida y la colaboración de las ONG y de las administraciones públicas fue clave para poder dar respuesta a esta crisis y alcanzar el reto de atender a la población ucraniana al tiempo que se seguía dando respuesta a incremento de otros flujos de refugiados procedentes de otras crisis, como Afganistán, Centro América, Venezuela o Perú.
Durante este tiempo también se ha puesto en marcha, con grandes resultados, el programa de Acogida en familia, con Fundación La Caixa, y que se ha implementado en Madrid, Barcelona, Málaga y Murcia. Los resultados, en términos generales, son positivos, destacando la ausencia de sinhogarismo.
Importancia del trabajo en coordinación
El Ministerio de Migraciones pone el foco en la importancia del trabajo realizado de forma coordinada y conjunta para poder dar una respuesta eficaz y rápida en esta guerra. “Se ha realizado un esfuerzo colectivo para afrontar un reto histórico”, indican desde la SEM.
Este trabajo ha sido, y es, desarrollado coordinadamente con otras administraciones públicas, sociedad civil, entidades privadas y ONG, y van desde el apoyo a la documentación, atención sanitaria, educativa y menores, al desarrollo de aplicativos de ayuda al empleo, alquiler de vivienda, o a la dotación de suministro en los CREADE, entre otras muchas intervenciones y trabajos de logística.
Inversión de más de 1.400 millones de euros
La inversión de España en estos dos años ha superado los 1.400 millones de euros, ya que, además de fondos del Gobierno estatal, ha contado con cofinanciación de la Unión Europea.
En 2022, con el estallido de la guerra, se aprobó una línea de crédito extraordinario por 1.200 millones de euros que, en buena parte, entre 2022 y 2023, fueron transferidos a otros ministerios, como Sanidad o Educación, que, a su vez, lo han ido transfiriendo a las Comunidades Autónomas en función de los gastos que éstas han justificado. También se lanzaron dos convocatorias destinadas a diversos gastos de atención a población ucraniana realizados por CCAA, Ayuntamientos y otras entidades locales.
En relación con fondos europeos, a través de cofinanciación, la Comisión concedió 28 millones que han sido incorporados al Programa Nacional español del Fondo de Asilo Migración e Integración (FAMI), y otros 209 millones, a través del Fondo Social Europeo (FSE). En la actualidad, están pendientes de la aceptación final de la Comisión bajo el paraguas del FSE, otros 50 millones de euros.
