La Conselleria de Familias y Asuntos Sociales lamenta que la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones haya declinado aprovechar su visita hoy a las Illes Balears para mantener una reunión formal con el Govern para tratar la actual crisis migratoria, así como otras cuestiones dependientes del Gobierno de España y que afectan a los ciudadanos de las Illes Balears.
Después de haberse enterado por terceros de la presencia de la ministra Saiz en el Atlàntida Film Festival, la consellera de Familias y Asuntos Sociales solicitó el pasado jueves por carta una reunión formal para abordar la respuesta a la crisis migratoria en las islas, un aspecto que se trató pero que no se terminó de concretar en la Conferencia Sectorial de la Inmigración del pasado día 22 de julio, y que requiere de una actuación urgente a raíz de la consolidación de las Illes Balears como ruta migratoria. Otras cuestiones que debían abordarse son la falta de dotación de la Administración General del Estado en las Islas, sobre todo la que afecta a la Seguridad Social y que se traduce en retrasos en la atención y tramitación de prestaciones a los ciudadanos, como el Ingreso Mínimo Vital. Una prestación que al parecer se quiere transferir a alguna comunidad autónoma, una posibilidad que Baleares también querría plantear.
La respuesta fue la negativa a mantener una reunión, emplazando a la consellera sólo a participar de una visita prevista por la ministra
Desde el Govern de les Illes Balears se entiende que la actual crisis migratoria, con el aumento de llegada de pateras y la sobreocupación de los servicios de atención de menores, dependientes de los consejos insulares -con los que la ministra también ha declinado reunirse- requiere de una reunión formal en un formato que permita analizar la situación en profundidad y buscar las soluciones específicas a esta realidad en las Illes Balears. En cambio, la ministra convoca una rueda de prensa sobre el tema sin haber previamente contactado ni analizado la situación con las instituciones locales, en un evidente desprecio a las instituciones y ciudadanos de las Illes Balears.
