PIMEM califica de “hiperinflación” la situación que se vive con la subida de los precios hecho que preocupa a la patronal al considerar que puede ser el principal problema que tengan que afrontar las empresas y autónomos incluso superando los efectos de la COVID.
Y es que la subida de los precios toca de lleno los bolsillos de los consumidores provocando una bajada de las compras y con unos efectos directos en la producción. Las empresas y autónomos por su parte no tienen capacidad para repercutir estas subidas en sus cuentas de resultados ya que muchas de estas empresas salen de una situación muy delicada debido a los efectos de la pandemia.
PIMEM asegura que este nuevo escenario frena en seco la recuperación económica iniciada en junio-julio del año pasado y pone en grave riesgo la tan deseada reactivación.
A la hora de señalar aspectos concretos de esta “hiperinflación” la patronal asegura que la subida de los precios de la energía es un factor clave e insiste que el control de los oligopolios y la falta de competencia real dificultan unos precios competitivos. En este sentido PIMEM pide fijar un precio máximo y eliminar el gas del cálculo energético. En referencia al combustible la Federació asegura que ahora se tiene que hacer un seguimiento del comportamiento de las ayudas de los 20 céntimos por litro que ha presentado el Estado.
Sobre las soluciones a esta subida inflacionista que se vive PIMEM asegura sentirse preocupada por lo que pueda ser una posible solución; la subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo. Esta medida, señala la patronal, si bien puede tener unos efectos positivos para los consumidores puede repercutir negativamente en las empresas ya que muchas de ellas están muy endeudadas. Y es que la patronal vuelve a recordar que la salida de la crisis originada por la pandemia ha dejado muchas pymes “tocadas” y cualquier subida del tipo de interés no hace más que subir los gastos relacionados con la gestión del crédito.
