La Trata de persona es un delito internacional, de lesa humanidad, que viola los Derechos Humanos y está catalogada como la forma de esclavitud del siglo XXI, por ello con esta campaña se busca sensibilizar el entorno de posibles víctimas para que en caso de indicio o sospecha de un posible caso de Trata de Personas, se denuncie y se busque la intervención del Ministerio de Relaciones Exteriores a través de las oficina consulares de Colombia en el exterior.
La campaña está enfocada, no a las víctimas, que están enceguecidas; sino a quienes las rodean, sus familiares, amigos, para animarlos a que reaccionen en caso de que noten algo extraño.
Y para evidenciar si las personas, en efecto, reaccionarán en cadena, se realizó un experimento social para medir cómo actuaría la gente del común ante una posible víctima. Lo que hizo la Cancillería fue contratar a un grupo experto en comunicaciones que se encargó de grabar con cámaras escondidas nueve experimentos en tres ciudades del país: Bogotá, Cali y Pereira.
Se grabaron las reacciones de más de 500 personas que no sabían que estaban participando en un experimento social. Solo al final, cuando rescataban a la “víctima”, se les contó de qué se trataba.
1. Sospeche de esas “oportunidades únicas”
Los delincuentes son expertos en detectar la necesidad más apremiante de una posible víctima. A veces se aprovechan de sus necesidades y los seducen con dinero; en otras apelan a sus carencias afectivas o al éxito. Si un ser querido recibe una oferta extraordinaria, de esas que le cambian la vida a uno, y que implica alejarse de su entorno familiar, es mejor dudar un poco.
2. Sueldo astronómico, sospecha segura
Aunque parece obvio, la ambición logra nublar hasta el sentido común. Si uno tiene estudios de primaria o secundaria y le ofrecen un sueldo de gerente de multinacional en el exterior, algo anda mal.
3. ¿Quién presta dinero fácil y sin garantías?
Los tratantes suelen ofrecer préstamos a las víctimas que no tienen dinero para los trámites de viaje, como pasaportes y visas. Esa es una señal de alerta.
4. ¡Fotos para hojas de vida en vestido de baño!
A un familiar le ofrecen un trabajo de niñera o de mesero. Y en la entrevista de trabajo les toman fotos del rostro y de cuerpo entero. E incluso a veces, con alguna excusa, les exigen fotos con poca ropa. Esa es una entrevista laboral muy rara, que merece una investigación más a fondo.
5. Contratos laborales en otro idioma
Los tratantes suelen engañar a sus víctimas, haciéndoles firmar contratos que luego les obligan a cumplir a la fuerza. Esos contratos vienen en idiomas muy poco conocidos, argumentando que en el país a donde viajan lo exigen así. No está de más buscar un traductor para leer lo que se está firmando.
6. Empleo en países extraños
Una oferta laboral en un país lejano y del cual el candidato no conoce el idioma ya encierra algo extraño. No saber el idioma del país de destino es una forma de cercar aún más a sus víctimas cuando estén fuera del país.
7. Itinerarios con varias escalas
Si un ser querido ya tiene los pasajes en la mano, revise muy bien el itinerario. Los tratantes organizan recorridos de viaje muy intrincados, con varias escalas y traslados. Esto lo hacen para dificultar el seguimiento posterior de la víctima y para evadir controles migratorios en ciertos países.
8. Ojo con los bares y la red
Aunque está es una recomendación general, es clave para el tema de trata de personas. Los tratantes buscan a sus víctimas en ambientes propicios para sus ofertas. Bares, cantinas o lugares de encuentro de jóvenes son los preferidos. Y si un ser querido pasa mucho tiempo en esos lugares, hay que activar una alerta. Lo mismo sucede con sitios virtuales. Es decir, redes sociales o páginas de búsqueda de pareja, que los delincuentes pueden usar como fachada para la “pesca” de víctimas.
9. Pareja por internet
Hay una modalidad de trata de personas que se llama “Matrimonio Servil”. El victimario enamora a una mujer que conoce por redes sociales o internet. El hombre nunca viene a conocerla y ya está dispuesto a casarse. Cuando viajan son sometidas y esclavizadas por su pareja. Aunque no siempre hay una intención dolosa, lo ideal es que el hombre venga a conocerla y sepa que su futura pareja tiene un entorno que está dispuesto a protegerla.
10. Una llamada salvadora
Cuando detectamos alguna de estas inconsistencias hay que “reaccionar en cadena”. Hablar con otras personas del entorno para conformar una cadena de protección alrededor de la víctima.
El segundo paso es informarse. Existe una Línea Gratuita contra la Trata de Personas, donde le resolverán las dudas que tenga. 018000 52 20 20 y la línea internacional 57 1 600 10 35. Las personas pueden comunicarse a estas de líneas de manera gratuita desde cualquier teléfono fijo o celular.
Si usted reside en Baleares y conoce un caso de estas características no dude en comunicarse con el consulado de Colombia en Palma de Mallorca. 971 72 9944, extensión 201 cpalmademallorca@cancilleria.gov.co