Al hablar de Uruguay tendríamos que referirnos también al propio partido fuera del campo que “jugó” la originaria de ese país, Fanny Delgado, residente en Mallorca. Ella sola desde un comienzo se comprometió a conseguir a los chavales para que pudieran defender el título. No fue fácil reunirlos lo que hizo peligrar su participación en el torneo.
El empeño, la voluntad y el empuje de Fanny le permitieron guardar la esperanza hasta último momento para que los niños de su país estuvieran en el torneo. Finalmente, un primo suyo, Pablo Rafael Delgado, quien ha estado vinculado al fútbol de Mallorca, convocó varios niños para que representaran al “paisito”.
De no haber sido por la lotería de los penaltis, Uruguay hubiese podido retener el título. En las semifinales se imponía a Colombia 3-1 hasta faltando cinco minutos. El empate a tres les obligó definir por penales. Quizá hubiera repetido título por el gran equipo que mostró comandado por Matías Colombo Martínez, de padres uruguayos, jugador del Son Cladera, a quien le espera un gran futuro.
“Me gustaría llegar a jugar en lo más alto del fútbol español, me encantaría”, dice Matías, con una gran dosis de confianza en sí mismo. Les agradece a sus padres María Nella y Rolando todo lo que han hecho por él para sacarlo adelante.