Baleares Sin Fronteras: ¿Qué balance entregaría de la actual legislatura que está a punto de terminar?
Carmen Ferrer: Ha sido una legislatura complicada donde la situación creada por la pandemia Covid-19 nos ha condicionado a todos y a la política municipal también. Se tuvo que cambiar toda la planificación inicial y centrarse en lo importante en ese momento, pero también nos ha permitido comprobar cómo somos capaces de dar una respuesta ágil y adecuada a situaciones imprevisibles.
BSF: ¿Qué logros destacaría concretamente?
C.F: Yo haría un balance positivo; creo que hemos dado respuesta a la mayoría de las necesidades que han ido surgiendo en esta situación de emergencia, pero además hemos conseguido sacar adelante propuestas de mejora del suministro de agua, con una inversión muy importante en infraestructuras de abastecimiento; también se ha invertido en instalaciones culturales como la Escuela de Música; en patrimonio, como la Casa Pagesa de Ca n’Andreu des Trull; así como la mejora de las instalaciones deportivas; no hemos dudado en invertir en centros para nuestros jóvenes al finalizar el Punt Jove de Jesús, renovar el de Santa Eulària y está en marcha la licitación del nuevo Punt Jove de Santa Gertrudis; sin olvidar las propuestas de ‘Joves al Carrer’ que han sido actividades para ellos y que se han realizado en las cinco parroquias del municipio, … también hemos colaborado con otras instituciones tanto para disponer de terrenos para poder construir colegios futuros como para tener nuevos centros de atención básica sanitaria… hemos podido realizar también obras importantes, gracias a la colaboración del Consell, como pueden ser la circunvalación de Sant Carles y próximamente la regeneración del núcleo urbano de Ca na Negreta… pero de lo que me siento más contenta es de la propuesta “digues la teva” que ha intentado tener reuniones en todas las zonas del municipio para que los ciudadanos puedan comentar lo que más les preocupa o que puedan opinar sobre las propuestas de los distintos proyectos que presentamos.
BSF: ¿Qué puede comentar sobre las últimas actuaciones: la asignación de un presupuesto de 2,42 millones de euros para la realización de distintas intervenciones en materia de uso de agua depurada?
C.F: Bueno, en realidad, la inversión de 2,4 millones no es sólo para uso de agua depurada. Este proyecto supone más de 400.000 euros y quiere dar un uso al agua depurada que saldrá de la nueva depuradora de Sa Coma.
Para nosotros es importante, dentro del ciclo del agua, poder usar esta agua depurada y no tirarla al mar. Hemos invertido mucho más que esta cifra en varias acciones relacionadas con el agua: municipalizar suministros locales, mejorar la red de abastecimiento y reducir pérdidas, incorporar el agua desalada en el suministro para poder recuperar acuíferos, realizar depósitos para poder mezclar agua desalada con agua de pozo, sectorizar las redes, incorporar contadores digitales,…. etc… todas las inversiones son pocas para respetar y ahorrar un recurso tan escaso como es el agua.
BSF: ¿Cómo serán las reformas al campo de fútbol de Jesús y las mejoras del estacionamiento en el Cementiri Nou?
C.F: En el campo de fútbol de Jesús se mejoran las instalaciones, se reforma la zona anexa de la cafetería y los baños convirtiéndolos en accesibles y la gran terraza anexa que permita mejorar los espacios de encuentro así como comunicarlos con un terreno colindante y municipal en donde se realizara una zona de descanso y con sombras, unas pistas de uso libre con diversidad de deportes, una zona de parque infantil, unas dos pistas de pádel y una zona de paseo… En el Cementiri Nou se ha acabado un tanatorio municipal que junto a las instalaciones de la zona, cementerio y crematorio, tiene la necesidad de espacios para poder aparcar y acceder con total normalidad y debido a la orogenia de la zona, que está en una colina, necesita realizar una importante obra para realizar los aparcamientos respetando siempre el entorno.
BSF: Se avecina la temporada turística y los empresarios preocupados en la contratación de personal. Sin embargo, a la vista está el problema de la limitación de vivienda y el alto coste de los alquileres. ¿Podría ser un problema que va a peor cada vez más?
C.F: Sin duda, las políticas de vivienda que se están ejecutando desde las administraciones que tienen las competencias no están surtiendo efecto y ya vimos el año pasado que esto, como dice, afecta también cada vez de forma más directa a la contratación de personal durante la temporada. Si no se hacen políticas inteligentes, si no se deja de lado la ideología y se apuesta por fórmulas con sentido común, me temo que será un problema que irá a más. Y no sólo afecta a los empresarios. A diario surgen nuevos casos de problemas en la sanidad pública por falta de profesionales, la llegada de fuerzas de seguridad del Estado cada año se ve limitada también por estas cuestiones, hemos visto cómo los sindicatos alertan de que podría cerrar la oficina de la Dirección General de Tráfico, entre otros muchos casos.
BSF: A propósito de vivienda. ¿El Ayuntamiento cederá algún solar al IBAVI para la construcción de vivienda social?
C.F: Sí y estamos trabajando en ello, aunque esta no es la única fórmula que existe para poder poner a disposición vivienda social, que creemos que ahora hace falta en régimen de alquiler. Me gustaría recordar que en Santa Eulària des Riu hemos inaugurado dos promociones de viviendas de protección oficial en pocos años, en la zona de es Puig d’en Valls, en régimen de cooperativa. Se trata de casas con todas las garantías, con unos precios limitados según los niveles que fija el Govern para las viviendas sociales, que han sido ejecutadas sin mayores problemas y que han dado hogar a un centenar de familias.
BSF: Dicen que después de la tormenta viene la calma. Nadie esperaba encontrarse con los estragos de la pandemia. Hay muchas cosas seguramente que tiene que decir… ¿qué es lo que más recuerda?
C.F: Muchas situaciones difíciles, pero destaco la respuesta que supimos dar a las circunstancias tan especiales que se dieron. La ciudadanía fue ejemplar, pero también me gustaría destacar la respuesta de los trabajadores del Ayuntamiento, continuamente adaptándose a las restricciones, a la incertidumbre e incluso las duda sobre si su seguridad personal podría estar comprometida por el servicio público. Creo que es algo de lo que podemos estar muy orgullosos en Santa Eulària. Y, por supuesto, aprovecho para agradecer el grandísimo trabajo, empezando por la Policía Local y acabando por el personal de Servicios Sociales, pero sin olvidar a ninguno de los trabajadores municipales que se implicaron al cien por cien.
BSF: La primera mujer en gobernar en Santa Eulària. ¿Después de estos cuatro años se siente positivamente valorada por la ciudadanía para volver a comenzar otra legislatura?
C.F: La valoración la darán las urnas en mayo próximo y será inapelable. Pero creo que el trabajo que hemos hecho desde el equipo de Gobierno ha sido excelente y la gente lo va a reconocer así en las urnas. Me he presentado nuevamente como candidata porque me siento respaldada por mi equipo, por mi partido y creo que también tendré el apoyo de la ciudadanía. Si tuviera dudas al respecto, si pensase que no tengo nada que aportar, daría un paso al lado. Pero, como digo, tengo ganas y tengo plena confianza en que tendré el apoyo de mis vecinos.
BSF: A la inmigración se le suele estigmatizar con coyunturas sociales negativas. ¿Cómo define la convivencia en su municipio en donde reside una gran variedad de culturas?
C.F: Santa Eulària des Riu es un municipio tranquilo, donde hay una conciencia y una tradición de aceptación de las diferencias. Aquí, quien viene a disfrutar de nuestro municipio por unos días, el que viene a trabajar, el que fija aquí su residencia; cualquiera es bienvenido siempre que sea respetuoso y no pretenda crear conflictos. Esa es una de nuestras señas de identidad y creo que eso se ajusta a la realidad que vivimos. Además, por mi experiencia, las personas que vienen aquí suelen hacerlo con ganas de trabajar, de vivir tranquilos, de hacer su vida. Unos se integran más en la vida del pueblo, otros no sienten esa necesidad, pero siempre hay actividades que intentan facilitar esa integración que creemos tan importante.
BSF: Tenemos entendido que uno de los municipios más solidarios con Ucrania ha sido Santa Eulària. ¿Cómo resume el plan de ayudas durante este tiempo de guerra?
C.F: En Santa Eulària tenemos una de las comunidades ucranianas más numerosas de la isla y lo que hemos hecho ha sido ir de la mano de esta comunidad para tratar de darle apoyo en aquello que pensaran que podía serles más útil. Junto con ellos, hemos hecho recogidas de alimentos, medicinas y ropa; hemos tratado de agilizar al máximo los trámites que nos correspondían para aquellas personas refugiadas que han venido por la guerra y hemos tratado de ayudarles a la hora de dar visibilidad a su situación y al drama que está viviendo su pueblo. También creo que el pueblo de Santa Eulària ha dado una vez muestras de su solidaridad.
BSF: Un mensaje a la ciudadanía.
C.F: El mensaje que me gustaría transmitir a la ciudadanía es que nuestra vocación es el servicio público y que no duden en acercarse a nosotros para ayudarles en lo que nos sea posible o para transmitirnos aquello que sugirieren para mejorar. Querer a nuestro lugar de vida, respetarlo y conocer sus raíces nos ayuda a la convivencia, a la sostenibilidad y en definitiva a crear pueblo y comunidad.