Desde PIMEM se apoya y se valora como positivo la voluntad el Govern de les Illes Balears de atajar el turismo de excesos, compartiendo que es prioritario erradicar este tipo de turismo que no genera valor.
Dicho esto, desde la patronal mallorquina se propone superar la zonificación de las tres zonas contempladas para extenderlo a toda la capital y a todo el litoral, incrementando el control policial en las zonas donde haya concentración de este tipo de turismo de fiesta, ruido y alcohol en espacios públicos.
Finalmente, desde PIMEM COMERÇ se quiere dejar constancia su oposición a que sean precisamente los comerciantes quienes deban ver restringido su horario de apertura. Máxime si hablamos que está vinculada a una zonificación en la que el potencial consumidor puede desplazarse a zonas próximas sin limitación horaria o incluso recurrir a la venta ambulante o irregular, tan presente como habitual. Es la administración quien tiene y debe que ejercer la función de control policial; no es el pequeño comerciante quien tiene que ver restringido su libertad empresarial de apertura y de dirección de negocio.