El Ayuntamiento de Calvià ha implementado este año nuevas restricciones en sus playas con el objetivo de fortalecer la seguridad de los bañistas y preservar el entorno marino. Estas medidas incluyen la ampliación de las zonas de baño delimitadas por boyas en las playas más concurridas del municipio. En el caso de Santa Ponça, se ha ampliado de los 90 m previos hasta los 200 m, el máximo permitido por la normativa vigente. Los pliegos técnicos para los servicios de balizamiento para esta temporada ya estipulaban el aumento de las áreas de baño delimitadas por boyas que reduce el espacio para la navegación deportiva cerca de los arenales.
Según la teniente de alcalde de Turismo, Elisa Monserrat: “el Ayuntamiento no busca obstaculizar la navegación recreativa, sino priorizar la seguridad de los usuarios de las playas y la protección del entorno marino, incluyendo la posidonia”. En las áreas de Ses Rotes Velles y Caló d’en Pellicer del núcleo de Santa Ponça, el balizamiento es el más grande posible para preservar la zona de baño, lo que ha provocado quejas de usuarios porque algunas embarcaciones operan a velocidades excesivas sin respetar estas áreas.
Desde 1991, la normativa establece que las balizas que delimitan las zonas de baño pueden situarse a una distancia máxima de 200 metros de la costa, con el fin de evitar que las embarcaciones se acerquen demasiado y garantizar la seguridad de los usuarios. La reciente ampliación del balizamiento en Santa Ponça y otras playas del municipio refuerza la seguridad en las zonas de baño más concurridas del municipio y, además, contribuye a un mayor respeto acústico y medioambiental, y a la conservación de la posidonia.
El servicio de balizamiento en las playas de Calvià debe permanecer activo durante toda la temporada de baño y la adjudicataria tiene la responsabilidad de reportar cualquier incidencia. Las boyas están equipadas con anclajes ecológicos para cuidar el lecho marino. Cabe señalar que la distancia entre las balizas y la costa podría ser modificada mediante decreto de Alcaldía por razones de seguridad o cambios normativos, sin derecho a indemnización para el adjudicatario.
El Ayuntamiento de Calvià, a través de su Departamento de Playas y Litoral, trabaja en colaboración con la Conselleria del Mar y la Capitanía Marítima para mejorar la seguridad en el litoral del municipio. En consonancia con este compromiso, en junio de 2024 se descartó la instalación de un circuito de motos acuáticas en Magaluf y Cala Vinyes. Esta decisión, avalada por un informe desfavorable enviado a la Conselleria del Mar, se alinea con el modelo de turismo sostenible promovido por el Plan de Playas 2023-2027, que apuesta por un ocio responsable y familiar.