Por Juan Pablo Blanco A
Aunque no hay nada claro aún sobre la reanudación de las competiciones autonómicas en las diferentes categorías, el Presidente de la Federación Balear de Fútbol, Miguel Bestard confía en que el Govern balear dé el visto bueno el próximo 1º de marzo para que las diferentes ligas comiencen nuevamente su actividad.
En teoría, la Conselleria de Salut tendrá que pronunciarse al final de esta semana sobre las próximas medidas que relajarán restricciones. El fútbol regional en sus diferentes categorías está a la espera de los criterios que a lo largo de estos días se darán a conocer.
Cabe recordar que a mediados de diciembre las diferentes ligas se suspendieron debido a las restricciones impuestas por el Govern, entre ellas el deporte federado en las categorías autonómicas. En esa línea, desde finales de 2020 los clubes están sin competencia por haber pasado a nivel 4, ya que evidenciaba un extremo riesgo de contagio de Covid-19.
Desde aquel entonces, la normativa admitía dos entrenamientos semanales sin contacto en los deportes de equipo. Algunos en un comienzo optaron por seguir su actividad física, sin embargo, con el transcurso de los días y al no haber fecha concreta para el reinicio de la competencia decidieron cancelar los entrenos.
No obstante, a pesar de la bajada notable de los contagios, ante el anuncio de sanidad de hacer una desescalada lenta y progresiva en todos los sectores, aún se plantean dudas sobre el reinicio de las diferentes ligas.
Desde la FFIB se tienen varios planes de ajuste en la confección de los calendarios, pero no niegan que entre mayor tiempo transcurra menor será el margen de acción, especialmente por las dificultades que conlleva terminar las ligas en el verano.
De todas maneras, Bestard en diálogo con este periódico manifestó su optimismo en que el fútbol regional regrese pronto. El también vicepresidente de la RFEF adelantó que aún no ha tenido contacto con Fina Santiago, consellera d’Afers Socials i Esports, pero advirtió que la decisión final siempre pasa por las autoridades sanitarias.
El dirigente mallorquín agradeció la implicación de Santiago y Carles Gonyalons, director general d’Esports. “Durante todo este tiempo han estado a la altura y dándonos las indicaciones para que llegado el momento podamos comenzar con todas las garantías del caso”, sin embargo, admitió que al día hoy la incertidumbre está a la orden del día.
En una hipotética autorización para la reanudación de las competiciones, la FFIB prevé dar el pistoletazo de salida al fin de semana siguiente. Los márgenes de tiempo son estrechos y no se puede permitir seguir postergando las jornadas, afirman.
El deporte declarado actividad esencial
Para Miguel Bestard, los campos de fútbol son los que menos riesgos de contagios generan y el deporte es sinónimo de buena salud. Y en esa línea, defendió la proposición no de ley del Grupo Popular de la Comisión de Cultura y Deportes del Congreso, aprobada el pasado jueves para la declaración de la actividad física y el deporte como actividad esencial, con 25 votos a favor y 12 abstenciones, tras la incorporación de una enmienda transaccional del Grupo Socialista.
La iniciativa se ampara en que la práctica del deporte es de beneficio para la salud de las personas, “matizando en su esencialidad desde el contexto de la pandemia sanitaria del COVID-19”, además, de la declaración de la actividad física y el deporte como cuestión de interés general que el Congreso aprobó en octubre.
De la misma manera, propone la implantación de las medidas necesarias para “garantizar la protección y continuidad de los servicios profesionales prestados en este ámbito al conjunto de la sociedad y la garantía de que sigan recibiendo estos servicios quienes requieran una especial atención, por edad, capacidad física o psíquica, o patologías”.
