Indignación colectiva
La Policía Nacional investiga denuncias por estafas masivas a inmigrantes en venta de billetes de avión
Los afectados podrían elevarse al centenar, al cierre de esta edición la Policía Nacional reportaba 50 denuncias
Por Juan Pablo Blanco A
Antes de circular este periódico en la calle, desde la Policía Nacional nos informaban que las denuncias a la agencia de viajes, Sunny World Travels, localizada en la calle Capitán Vila 14, Palma, superaban las cincuenta. Esta dantesca historia comienza a perpetrarse hace meses atrás cuando los viajeros entregaban el dinero en la agencia, que apenas hacía la reserva del billete de avión. Lo que no esperaban los clientes era que en el momento de proceder a mostrar su tiquete en la aerolínea los fueran a devolver por la no emisión oficial del documento por parte de la agencia.
A las diversas pesadillas de este caso, por ejemplo, describir que en medio de la incredulidad y el desconcierto tras ser inadmitidos por las aerolíneas, varios afectados se apostaron a las puertas de la agencia el sábado 28 de noviembre sobre el medio día. La desagradable sorpresa surgió cuando al llegar nadie daba razón del propietario, conocido dentro del colectivo inmigrante, como “Samuel”.
Las persianas metálicas del local estaban abajo, nadie atendía los números de móviles de contacto y la información era nula. La desazón de las víctimas no dio tregua, las pintadas en la puerta con frases de “estafadores” no hicieron esperar. El mismo sábado, patrulleros de la Policía Nacional acudieron a la agencia para calmar los ánimos enardecidos de personas, que incluso al día de hoy, han visto frustrado su viaje.
El irreparable daño amplió sus tentáculos a la India, Colombia, Ecuador y algunos lugares de Europa y África, en donde hay personas que no han podido regresar a Mallorca. Las investigaciones no solo apuntan a compradores que finalmente no han viajado, sino a personas a las que únicamente les fue válido el billete al destino de origen, no obstante, al tratar de regresar la aerolínea les ha comunicado que la vuelta no está emitida. Literalmente, se han quedado a mitad de camino, tal y como sucede en la India, donde algunos de los compatriotas del propietario de la agencia se han quedado a mitad de camino.
La indignación se ha extendido al el sector de las agencias de viajes que trabajan con el colectivo inmigrante. Preocupa que el inmenso daño repercuta negativamente entre los potenciales clientes. El responsable de una agencia que prefiere guardar el anonimato, expresaba su rechazo por este tipo de situaciones que, dicho sea, agrega “se presentan por falta de controles de las autoridades del sector para quienes de la noche a la mañana abren un negocio de estas características”, el empresario de viajes considera que “deben ser más escrupulosos y exigentes para que no se llegue a este tipo de extremos en aras de proteger a los usuarios”.
Uno de ellos hace un llamamiento afirmando que “no nos pueden meter a todos en el mismo saco, la inmensa mayoría que trabajamos con personas inmigrantes somos serios y responsables, nunca les hemos fallado a nuestros clientes, por el contrario, siempre les ofrecemos las mejores alternativas”
Afectados
Un par de ciudadanos de origen indio, Rajiv y Parminder tenían todo preparado para viajar a su país de origen, concretamente a Amritsar, sin embargo, el lunes 30 de noviembre estaban a las afueras del local esperando que alguien respondiera por el importe de sus billetes. En el caso de Rajiv asegura que pagó 955 euros para viajar junto a su hijo. Tenían que viajar el 8 de diciembre y regresar el 6 de abril. “Los billetes nunca fueron emitidos, fuimos estafados”. Su amigo, Parminder pagó 800 euros por un pasaje, supuestamente tenía que volar el 10 de enero y regresar el 10 de abril, tampoco el billete de avión se hizo efectivo.
La colombiana, Luz Estela Martínez se disponía a viajar el próximo 18 de enero. En declaraciones a este periódico comenta que el pasaje le había costado 930 euros, de los cuales pagó 430 euros, le faltaba por abonar la diferencia. Su estupefacción fue máxima cuando al llegar a la agencia a pagar otra cuota se encontró con la noticia de que el dueño había cerrado. “Perdí mi dinero “, comenta.
Situación similar vive Julio César Meléndez, trabajador en un hotel de Bayanbulfar en mantenimiento que viajaba a Cali, Colombia, el 25 de diciembre. El billete le costó 960 euros. “Para que me sostuvieran el vuelo tenía que pagar todo de contado”. El día que salió en el Diario de Mallorca se preocupó. Las predicciones confirmaron que su billete no había sido admitido. “Al siguiente día puse la denuncia en la Policía Nacional”. De todas, maneras el viaje sigue en pie, “necesito ir urgentemente a mi país, mi familia en Colombia reunió el dinero y me hizo un préstamo”, sin embargo, para el ciudadano sudamericano no es fácil asumir que “te hagan un agujero a tu economía de esta forma, menos en esta época”.
Colombia, está dentro de la lista de países más afectados por la estafa. Luz Helena Hernández, compró su billete para el 2 de enero, le costó 895 euros. La ruta era Palma-Madrid- Armenia. Advierte que “el lunes 30 de noviembre me di cuenta de la estafa por información de una amiga que corrió la misma suerte, ella había pagado 1.200 euros. A mi amiga, la hermana le solucionó el problema con un préstamo y ya se encuentra en Colombia”.
El suegro de Luz Helena se sensibilizó con su situación y le prestó un dinero no solo a ella sino también a su prima, Gloria Estela Daza, también afectada, que le había pagado 895 euros a Sunny World Travels para viajar a Colombia”
La lista de afectados llega a Paris, donde el venezolano Víctor Erazo, obligado a salir de Mallorca por la crisis, encontró trabajo. Su esposa e hijos, aún viven en la Isla y su intención era pasar unas vacaciones junto a su familia este diciembre. “Quería compartir las fiestas con ellos, esos desgraciados me han truncado la ilusión, no tengo dinero para ir”, se lamenta, para añadir que su esposa compró el pasaje en la agencia, jamás se imaginaron este bochornoso desenlace.
Leonor Lema Romero, ecuatoriana, vendedora de ropa, pensaba viajar el 9 de diciembre pero tuvo que postergar seis días más el vuelo. El 15 de diciembre se irá a Guayaquil. “Tuve que comprar el billete más caro, solamente ida 970 euros y el regreso está en suspenso porque el dinero no me alcanzaba. Le había pagado a la Sunny Travel 700 euros y me han hecho un gran daño”.
El número de víctimas podría se hace más extensivo, sin embargo, las historias publicadas son similares. Por el momento, en la pared contigua a la agencia, días atrás se publicaba un número de teléfono para constituir una plataforma de afectados.
Baleares Sin Fronteras en la próxima edición contactará con la vicepresidencia del Govern balear, área de turismo para hacer las respectivas averiguaciones sobre los requisitos y documentación exigida a las agencias de viajes, especialmente en el momento de asumir responsabilidades ante los usuarios.
¿Qué dicen las empleadas?
Pala Báez: reside hace veinte años en la Isla. Es una de las trabajadoras de la agencia Sunny World Travels. Aclara que ella como empleada no procedía al pago de los billetes de líneas aéreas ni proveedores, de eso se encargaba su jefe u otra persona de su entera confianza.
Asegura que es otra de las indignadas, y recalca que se considera tan víctima como los propios pasajeros, “pues me deben varios meses de trabajo”. En este momento, Paula que siempre ha trabajado en agencias de viajes, se encuentra de baja por una operación de hernia discal. Desde la Policía Nacional se han puesto en contacto con ella, pero les dijo que por su convalecencia era imposible desplazarse a prestar declaración, de todas maneras las puertas de mi casa están abiertas en Esporles para que vengan a interrogarme.
Desde su cama, sin poder casi moverse, relata que hace todo lo posible por leer los medios de comunicación y estar enterada de lo que sucede por las redes sociales. “Tengo mi familia y mi casa aquí y jamás permitiría que en mis narices y teniendo conocimiento que pasase algo de esta magnitud, siempre he defendido a los clientes, especialmente al colectivo inmigrante para que he atendido gran parte de mi vida en las agencias de viajes para las que he trabajado”.
Sobre su trabajo que venía realizando desde mayo del año pasado en Sunny Word Travel, afirma que todo era normal. Aún se pregunta el porqué de esta situación “si era una agencia que tenía muchísimos clientes, trabajaba muy bien, aún no me lo explicó, le doy vueltas a la casa y no encuentro una respuesta”.
Desde su lecho de convalecencia, Paula le envía un mensaje a “Samuel” en caso de que leyera este artículo. “Lo más noble y decente es dar la cara y explicarle a la gente que ha ocurrido y reparar los daños causados”. Por expreso pedido de la mujer de origen dominicano, publicamos el número de contacto en el caso de que alguna de las víctimas quieran comunicarse con ella para asesorarles en lo que esté al alcance de sus manos. 654 06 56 33
Jackeline Díaz trabajaba hace poco con “Samuel”. Hace dos semanas comenzó en la agencia atendiendo al cliente. “Nunca note nada raro, nos dijo que viajaría a la India el martes 24 de noviembre pero el jueves 26 ya estaba de regreso”, prosigue en su relato que antes de irse le explicó todos los detalles de su trabajo.
Tras el fugaz viaje por la India, el viernes 27 de noviembre, al caer la tarde, sobre las 19h le dijo que se fuera a casa porque se iba encargar de hacer unos pagos y arreglar temas de la agencia. El sábado, la empleada se presentó en el horario de trabajo sobre las 10:30h, a partir de ahí comenzó a notar una serie de anomalías.
“Llegó un señor con una maleta del aeropuerto reclamando que no le habían emitido su billete, estaba enfadado y llamó a la Policía”, acto seguido Jackeline fue requerida por las autoridades para que les informara sobre el paradero del propietario de la agencia. “No sabía nada, no tenía el móvil de él, me dijo que lo había dejado olvidado en la India”. Finalmente al ver el disgusto de las personas que llegaban a la agencia, optó por regresar a su domicilio. “No tengo nada que ver en esto, era una empleada, además este señor también al día de hoy me debe dos semanas de trabajo”.
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¿Qué debe hacer después de abonar un billete aéreo?
Es una guía orientativa que nos han enviado desde una agencia de viajes cuyo volumen de clientes potenciales son inmigrantes. Prefieren guardar el anonimato
Primero: comprobar que el billete aparte de tener un número de localizador tenga un número de billete electrónico. De lo contrario no existe emisión.
Segundo: el pasajero tendrá el derecho y la obligación de llamar a la compañía y confirmar la emisión del billete adquirido.
Tercero: el pasajero mediante la página de internet www.checkmytryp.com podrá en todo momento conocer el estado de su vuelo, como cambio de horarios, rutas y cancelaciones. Verificar que desde el primer momento debajo de sus datos indica un numero identificativo del billete entonces de esta manera estará su billete emitido.
Cuarto: recuerde que 48 horas antes, bien en su agencia de confianza, o en la página www.checkmytryp.com y el los teléfonos de atención de las correspondientes compañías debe de revisar los cambios ya que de lo contrario puede el pasajero tener problemas con la compañía.
Comprar siempre en agencias acreditadas por la Concellería de Turismo, no duden en solicitar las oportunas licencias.
